El Centro regional de Estudios Económicos Sostenibles (CREES) de República Dominicana ha asegurado que los altos costes de producción así como las debilidades de las instituciones públicas son los restos más importantes a los que debe enfrentarse el país. El Centro regional de Estudios Económicos Sostenibles (CREES) de República Dominicana ha asegurado que los altos costes de producción así como las debilidades de las instituciones públicas son los restos más importantes a los que debe enfrentarse el país.
La prensa de la zona se ha hecho eco de estos datos publicados en la página web del organismo con datos del Índice de Competitividad Global. Señalan, como recoge la prensa de la zona, que estos son los desafíos a superar para elevar sus niveles de competitividad de cara a las exigencias del comercio internacional y los tratados de libre comercio.
A pesar de los esfuerzos del Gobierno, el país cuenta con uno de los peores servicios de energía eléctrica y de telefonía, según CREES. Lo mismo que en competitividad, de hecho el país refleja una calificación de 2,1, en rango de uno a siete, solo por delante de Haití (dos) y Venezuela (1,8). Además, alcanza una puntuación de 2,3, en el indicador de Infraestructura Eléctrica y de Telefonía por debajo del 4,2, que es el promedio de los países centroamericanos.
Sobre este estudio, el vicepresidente ejecutivo de CREES, Ernesto Selman, ha asegurado que los costes de la factura eléctrica, subsidios y autogeneración forman un “precio sombra” muy elevado que penaliza la capacidad de competir de las empresas radicadas en el país.
Aunque no es el único sector en el que el país pierde la partida, en el Índice de Competitividad Global 2013-2014, del Foro Económico Mundial el país se ubica en la posición 142 de 148 países, en lo referido a desvío de fondos públicos y en la 138 en cuanto a despilfarro del gasto público y en la 143 en confianza pública en los políticos, lo que impide que puedan consolidarse las acciones para hacer más eficiente el gasto público en temas de mayor prioridad para la nación, como es el sector eléctrico y la deuda externa.