Francisca Valenzuela

Cada vez más cosmopolita e integrada en el tumulto de la ciudad estadounidense de Los Angeles, donde reside seis meses al año, la cantante chilena Francisca Valenzuela acaba de lanzar un nuevo disco, ‘Tajo Abierto’, con el que espera consolidar su presencia en los mercados internacionales. Cada vez más cosmopolita e integrada en el tumulto de la ciudad estadounidense de Los Angeles, donde reside seis meses al año, la cantante chilena Francisca Valenzuela acaba de lanzar un nuevo disco, ‘Tajo Abierto’, con el que espera consolidar su presencia en los mercados internacionales.

De hecho, a pesar de su nacionalidad, Valenzuela nació en la ciudad californiana de San Francisco y residió allí hasta los doce años, lo que refuerza su tendencia a llevar su música a otros países y tiene que ver también, con la inclusión en sus trabajos de alguna que otra canción en inglés.

Para su tercer álbum, Francisca ha utilizado un grupo heterogéneo de productores y estudios que le otorgan un sonido contemporáneo y variado. Y hasta se ha atrevido a incluir una ‘especie de cueca’, la canción «Cuequita del corazón», probablemente una de las mejores del disco.

La artista considera prioritarios para su expansión internacional, los mercados mexicano y español y, por eso, en la actual gira de presentación del álbum tiene previsto actuar con frecuencia, además de en Chile, en ambos países en los próximos meses.

De momento, el público madrileño tuvo ocasión de presenciar una actuación de Francisca el pasado sábado en el Festival ‘Dcode 2014’. Valenzuela formaba parte de un interesante cartel internacional en el que figuraban también, entre otros Beck, Vestuta Morla, Chvrches y Anna Calvi.

La cantante chilena dejó una buena impresión a un público español que empieza a conocerla. Tal vez, lo único que le falte, de momento, para completar el éxito, sea esa canción mágica que, sin que nadie conozca los motivos, abre todas las puertas. Pero todo llegará.

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