No es la primera vez que esta sensacional cantante hondureña, ya casi ciudadana de Madrid, se asoma a nuestro café. La artista hace buen jazz, con repertorio original en castellano y se sabe de memoria los trucos de sus grandes predecesoras anglosajonas. No es la primera vez que esta sensacional cantante hondureña, ya casi ciudadana de Madrid, se asoma a nuestro café. La artista hace buen jazz, con repertorio original en castellano y se sabe de memoria los trucos de sus grandes predecesoras anglosajonas, pero tiene estilo propio.
¿No creen que son motivos suficientes para acudir a verla en directo a cualquier club? Pues aprovenchen la oportunidad cuando la tengan porque Eva es una habitual de los escenarioa más íntimos de las grandes capitales mundiales del jazz.