Comienza nueva edición del BAFICI en medio de polémica con Gobierno

Cientos de miembros el sector audiovisual se manifiestan contra el Ejecutivo de Macri ya que sospechan que pretende eliminar las principales fuentes de financiación de la industria nacional para, entre otras cosas, beneficiar a grandes conglomerados mediáticos. El BAFICI, el festival de cine independiente más importante de América Latina, quedó inaugurado ayer con la película alemana «Casting» en el cine Gaumont de la ciudad de Buenos Aires, frente al que se manifestaron cientos de personas en medio del conflicto entre el sector audiovisual y el Gobierno nacional.

La manifestación fue convocada por el autodenominado grupo «Asamblea Permanente en Defensa del Cine Argentino» como protesta ante la decisión del ministro de Cultura, Pablo Avelluto, de pedirle la renuncia al titular del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA), Alejandro Cacetta, y los rumores sobre una supuesta intervención de la entidad.

«Yo defiendo al cine argentino» y «No a la intervención del INCAA» fueron otras de las consignas que los manifestantes también levantaron frente al cine Gaumont, situado en el centro de Buenos Aires, a 150 metros del Parlamento argentino.

El conflicto comenzó poco antes de Semana Santa, cuando Avelluto pidió la renuncia a Cacetta «debido a la necesidad de acelerar y profundizar los procesos de mejora administrativa en el INCAA». Si bien en su comunicado Avelluto admitía su «compromiso» durante su gestión, al mismo tiempo pidió que la Oficina Anticorrupción investigue presuntas «inconsistencias en los gastos (del INCAA)».

El lunes se concretaron además despidos de otros gerentes del INCAA, pocas horas después de que unos 200 directores, actores, productores y estudiantes de cine -entre ellos los cineastas Pino Solanas y Luis Puenzo- protestaran en la puerta del INCAA contra el despido de Cacetta y reclamaran la renuncia del ministro de Cultura.

Los sectores críticos con el Gobierno sospechan que detrás de las denuncias está la intención de intervenir el INCAA y eliminar las principales fuentes de financimiento del instituto de cine para, entre otras cosas, beneficiar a grandes conglomerados mediáticos. Uno de los principales ingresos del instituto proviene de un canon que pagan las emisoras de radio y TV para operar las señales.

Numerosas personalidades del cine apoyan el reclamo bajo la bandera «Defiendo al cine argentino». En los últimos días se viralizó un video en el que participan, entre otros, Leonardo Sbaraglia, Gustavo Santaolalla, Graciela Borges y Natalia Oreiro. Allí, denunciaron que detrás de los cambios en el INCAA «están en juego las instituciones de la ley de cine».

Este miércoles se sumó incluso el actor estadounidense Viggo Mortensen, que tiene una estrecha vinculación con la Argentina, donde pasó parte de su infancia, y fanático del club de fútbol San Lorenzo, quien grabó un video de apoyo en el que llama al presidente Mauricio Macri «fanfarrón neoliberal» y lo urge a no destruir el cine argentino.

El INCAA es un ente público, autárquico, que depende del Ministerio de Cultura nacional, encargado de promover y regular la producción audiovisual en territorio argentino y el cine argentino en el exterior. Administra el Fondo de Fomento Cinematográfico (FFC), que otorga créditos y subsidios a las películas argentinas y también aporta fondos para la celebración de festivales de cine.

El BAFICI cuenta con el apoyo del INCAA pero es además uno de los principales festivales de la ciudad de Buenos Aires, cuyo Gobierno está en manos del partido PRO, al que pertenece el presidente argentino Mauricio Macri.

Hasta el 30 de abril se podrán ver en el BAFICI más de 400 películas nacionales e internacionales de sello independiente. Entre los principales invitados del festival está el director, actor y guionista italiano Nanni Moretti.

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