Las actividades económicas de la presidenta argentina Cristina Fernández van viento en popa. Algo que queda patente con su declaración jurada sobre patrimonio para 2010, que la dirigente entregó a la Oficina Anticorrupción en el último día de plazo que tenía para ello. Según el documento, la riqueza de Cristina aumentó en 2010 un 27%, al haber pasado de 55 millones de pesos (alrededor de 8 millones de euros) a 70,5 millones (11 millones de euros). El aumento se ha producido por la revalorización de activos y el alquiler de inmuebles. Las actividades económicas de la presidenta argentina Cristina Fernández van viento en popa. Algo que queda patente con su declaración jurada sobre patrimonio para 2010, que la dirigente entregó a la Oficina Anticorrupción en el último día de plazo que tenía para ello. Según el documento, la riqueza de Cristina aumentó en 2010 un 27%, al haber pasado de 55 millones de pesos (alrededor de 8 millones de euros) a 70,5 millones (11 millones de euros). El aumento se ha producido por la revalorización de activos y el alquiler de inmuebles.
Según informa el medio argentino La Razón, este incremento no es extraño, ya que desde que llegó al poder junto con su fallecido marido Néstor Kirchner, el matrimonio ha visto incrementado su patrimonio diez veces. Con la revelación de estos datos, Cristina cumple con la ley argentina, que obliga a los funcionarios públicos a declarar su patrimonio cada año.
Los intereses revertidos por depósitos a plazo fijo, la revalorización de las empresas controladas por Cristina (Hotesur y la sociedad Los Sauces) y el alquiler de inmuebles (a nombre de Néstor Kirchner hay registrados 26, mientras que a nombre de Cristina, 2) han sido los puntales sobre los que se explica el aumento del patrimonio de la presidenta. Los bienes del fallecido ex presidente y esposo de Cristina serán repartidos próximamente entre la presidenta y sus hijos.
Cristina Fernández se prepara para conseguir su reelección en las elecciones presidenciales de octubre. Su candidatura junto a Amado Boudou, actual ministro de Economía que será su vicepresidente, por parte del Frente para la Victoria (FpV), parece invencible cuando apenas faltan dos meses para que se efectúen los comicios en los que se elegirán, además del presidente, el vicepresidente, 251 diputados nacionales y 61 senadores, estos últimos en un proceso de renovación que comprende sólo ocho provincias.
