Los subsidios en México, sobre todo los del petróleo, deberían desaparecer. Al menos así lo han sugerido los analistas del país y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), lo consideran a pesar que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público hubiera anunciado que mantendrá el beneficio. Los subsidios en México, sobre todo los del petróleo, deberían desaparecer. Al menos así lo han sugerido los analistas del país y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), lo consideran a pesar que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público hubiera anunciado que mantendrá el beneficio.
De acuerdo con uno de los compromisos del Pacto por México, rubricado por las principales fuerzas políticas del país, se llevaría a cabo una revisión integral a la política de subsidios y a los regímenes especiales que sean eficaces, transparentes y progresivos, aunque parece que en ello no entra el crudo.
A partir del pasado sábado, el subsidio se mantiene en nueve centavos por litro, de manera que el combustible de tipo Magna costará 10,81 pesos, la Premium 11,37 y el diesel 11,17 pesos. Ante esto, el subsecretario de Ingresos de Hacienda, Miguel Messmacher, ha descartado que este avance vaya a tener un impacto sensible sobre la inflación.
Según él, una política gradual en el precio de la gasolina y el diesel busca reducir el impacto de los mayores precios internacionales de los combustibles sobre las finanzas de las empresas y los hogares.
