El Parlamento Europeo ha celebrado un debate, durante la sesión plenaria celebrada hoy en Estrasburgo, sobre el acuerdo de cooperación entre la Unión Europea (UE) y Cuba, aprobado el año pasado y que marcaba un momento de inflexión en las relaciones bilaterales con el objetivo de impulsar el comerci
El Parlamento Europeo ha celebrado un debate, durante la sesión plenaria celebrada hoy en Estrasburgo, sobre el acuerdo de cooperación entre la Unión Europea (UE) y Cuba, aprobado el año pasado y que marcaba un momento de inflexión en las relaciones bilaterales con el objetivo de impulsar el comercio bilateral, el diálogo político y la cooperación económica.
Así, eurodiputados de todos los grupos políticos han coincidido hoy en la necesidad de seguir manteniendo el diálogo de la UE con las autoridades cubanas. No obstante, por parte del mayor grupo de la Eurocámara, el Partido Popular Europeo (PPE), el eurodiputado Luis de Grandes ha denunciado que “el régimen cubano sigue utilizando las detenciones arbitrarias y los despidos a funcionarios para silenciar opiniones contrarias al gobierno”.
Además, De Grandes subrayó que “a pesar de la supuesta apertura de Cuba al mundo, la Isla mantiene la censura en internet, así como restricciones indebidas al acceso a la información y a la libertad de expresión”. Con todo, Elena Valenciano del grupo de Socialistas y Demócratas (S&D) explicó que «la voluntad de la UE” es seguir manteniendo un “diálogo constructivo con La Habana».
En esta línea explicó que si bien «está claro que no puede cambiar todo tan rápido, debemos seguir construyendo la relación para el objetivo más importante, que es mejorar la vida de los cubanos».
Una postura a la que se sumó María Teresa Giménez Barbat de la Alianza de Liberales y Demócratas (ALDE) al afirmar que, “a día de hoy” sigue habiendo en la Isla una “involución de las libertades básicas”. La eurodiputada de Ciudadanos criticó además que la Alta Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Federica Mogherini no se entrevistara con presos políticos durante su viaje a La Habana.
Por su parte, Ernest Urtasun del grupo de los Verdes-ALE, censuró los cambios introducidos “por algunos grupos de esta Cámara, más propios de acuerdos del pasado”, al tiempo que puso de relieve “la necesidad de recuperar el escenario que dejó (Barack) Obama” en referencia a una política de mayor acercamiento a la Isla frente a las posiciones confrontacionales que representa su sucesor en la Casa Blanca, Donald Trump.
Finalmente, por lo que respecta a los grupos que cuentan con representación de eurodiputados españoles, Javier Couso del Grupo de la Izquierda Europea (GUE/NGL) rechazó la versión definitiva del acuerdo, que -según él- “pervierte” el tratado original y lleva a Cuba a “una transición del gusto neoliberal”.
Por parte de la Comisión Europea, la popia Federica Mogherini, explicó que se trata de “una ocasión para lanzar nuevos ámbitos de cooperación claves” y que “la UE volverá a mostrar su rechazo al embargo de EE.UU.” y a sus «efectos negativos para la población cubana». También insistió en que debe seguir aprovechándose las oportunidades que ofrecen las conversaciones entre La Habana y la UE, pese a las “diferencias” que existen entre ambas partes.
Asimismo, según la nota de prensa difundida por el servicio de prensa de la Eurocámara, cabe señalar que entre las preocupaciones del PE, destaca la protección de las empresas europeas contra los efectos del embargo comercial estadounidense, el apoyo a la inversión en Cuba, los derechos humanos y las relaciones interparlamentarias.
