El nuevo ministro de Cultura de Cuba, Rafael Bernal, ha debutado en el cargo en un concierto de artistas de la Isla para dar ánimos al enfermo presidente venezolano Hugo Chávez, que se encuentra en un hospital del país tratándose de un cáncer que se le detectó en 2011. El nuevo ministro de Cultura de Cuba, Rafael Bernal, ha debutado en el cargo en un concierto de artistas de la Isla para dar ánimos al enfermo presidente venezolano Hugo Chávez, que se encuentra en un hospital del país tratándose de un cáncer que se le detectó en 2011.
El concierto se celebró en la Casa del Alba, un centro cultural de la alianza de Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América, una organización de la que tanto Cuba como Venezuela son socios destacados. El acto contó con la actuación de Eduardo Sosa, Ivette Cepeda y el coro de Digna Guerra. Entre los presentes a la cita estuvo una delegación de jóvenes venezolanos y el embajador del país en La Habana, Ronald José Blanco.
Los artistas eran una nómina solvente, pero desprovista del brillo de las grandes figuras cubanas que suelen acompañar actos del aparato político. Algunas fuentes malintencionadas intentan encontrar una relación entre esas ausencias y el repentino cambio en el Ministerio de Cultura del histórico político Abel Prieto. El célebre escritor continúa como asesor de Raúl después de dejar el cargo después de 15 años con la cartera.
Los comentaristas de la política cubana apuntan que Prieto tiene entre sus amigos a algunos de los más famosos músicos y pintores cubanos, que reportan al país altos ingresos en los mercados internacionales, por lo que a Raúl Castro le conviene tener una relación cordial con el escritor.
Existe en los últimos meses una tensión entre grupos intelectuales por los cambios políticos en Cuba. Algunos como Arturo Arango ´han señalado en público sus diferencias con el régimen. En la presentación de una revista realizó unas matizadas críticas al castrismo. Para esta disidencia consentida los avances aperturistas y hacia la libertad todavía son insuficientes.
El concierto no ha sido el primer acto para homenajear al mandatario venezolano. El pasado domingo, el nuncio apostólico, Bruno Musaró, ofreció una misa en la catedral de La Habana para pedir por la salud del presidente de Venezuela. Al acto asistieron los ministros de Exteriores tanto de Venezuela, Nicolás Maduro como de Cuba, Bruno Rodríguez.
