El primer presidente de Latam Airlines será Enrique Cueto, quien desde el año 1994 lleva las riendas de la chilena LAN. Cueto, procedente de una familia de empresarios españoles, ha sido elogiado por su política de reducir costos y por convertir a la aerolínea chilena en una de las más rentables de América Latina. Latam, resultado de la fusión de la aerolínea brasileña TAM y de la chilena LAN, nace como la mayor aerolínea de la región. El primer presidente de Latam Airlines será Enrique Cueto, quien desde el año 1994 lleva las riendas de la chilena LAN. Cueto, procedente de una familia de empresarios españoles, ha sido elogiado por su política de reducir costos y por convertir a la aerolínea chilena en una de las más rentables de América Latina. Latam, resultado de la fusión de la aerolínea brasileña TAM y de la chilena LAN, nace como la mayor aerolínea de la región.
Enrique Cueto es visto como un estratega que se mantiene frío bajo presión y que ha llevado a cabo con éxito recortes de costos para dar mayor eficiencia a LAN. Cueto fue fundamental para la fusión con TAM, que culminará la ambición de años de su familia por entrar al gigantesco mercado brasileño y transformarse en un participante relevante en la industria aeronáutica mundial. Los Cueto son vistos como los accionistas clave en la transacción por 2.700 millones de dólares en títulos y ejercerán gran influencia sobre las decisiones de la nueva compañía.
El padre de Cueto, Juan Cueto Sierra, emigró a Chile y fundó una pequeña aerolínea llamada Fast Air Carrier en 1978. Cuatro años más tarde, Enrique Cueto se hizo cargo de la vicepresidencia de finanzas para más tarde ocupar el mismo cargo en el departamento ejecutivo.
El paso a la gran compañía, LAN, se dio en 1994 cuando pasó a ser CEO de LanChile, y su familia pasó a controlar la empresa junto con el empresario y, posteriormente, presidente de Chile, Sebastián Piñera, además de los grupos Hirmas y Heblen. El líder derechista mantiene una estrecha relación con los Cueto, quienes aumentaron su interés en la compañía al 31,8 por ciento, que representa actualmente un valor cercano a los 3.000 millones de dólares, cuando Piñera vendió su participación.
Los Cueto, que esperan contar con entre un 24 y un 25 por ciento en el nuevo grupo, acordaron términos societarios que cumplen con la regulación brasileña que prohíbe que extranjeros posean más de un 20 por ciento de una aerolínea local.
Además, la familia Cueto tiene una amistad con los controladores de TAM, la familia Amaro, quienes comparten un pasado similar. Usando sus ahorros y préstamos, el piloto Rolim Amaro compró TAM, una pequeña empresa de carga fundada en 1961, y la transformó en la mayor línea aérea de Brasil.
Las acciones de ambas aerolíneas aumentaron en la Bolsa de Nueva York después de anunciarse la fusión de TAM y LAN, con subidas de 24% y 2,5% respectivamente.