El líder de la oposición venezolana, Henrique Capriles, ha vuelto a quejarse de los chavistas. Esta vez por el “intento de golpe de Estado” para derrocarle de su puesto como gobernador de Miranda. El líder de la oposición venezolana, Henrique Capriles, ha vuelto a quejarse de los chavistas. Esta vez por el “intento de golpe de Estado” para derrocarle de su puesto como gobernador de Miranda.
Tal y como recoge la prensa latinoamericana, Capriles ha asegurado que los diputados regionales chavistas han iniciado gestiones para destituirle. “Si un grupito pretende hacerse de la Gobernación de Miranda por vía distinta al voto tendremos que defendernos por intento de golpe de Estado”, ha señalado en un discurso.
En concreto, tal y como recoge la prensa especializada, la mayoría afín a Nicolás Maduro en el Consejo Legislativo de Miranda pidió ayer al tribunal Supremo de Justicia información sobre que pasos deben seguirse para destituir al dirigente del partido Primero Justicia, al que acusan de centrarse demasiado en su faceta como líder nacional y dejar de lado sus responsabilidades regionales.
La presidenta del Consejo Legislativo de Miranda, Aurora Flores, ha asegurado que han pedido orientación para cumplir con los extremos constitucionales y lograr “la declaración de abandono absoluto” del cargo de Capriles como gobernador. Para ella, la gestión del gobernador es “virtual, de ficción. Es una cosa que viene de años pasados, es indolente, indiferente frente a las instituciones del Estado”.
Capriles se ha tomado esto como un sabotaje a su trabajo como gobernador. Lo que para sus detractores no existe, porque “no hay gestión que sabotear”. En cualquier caso, el opositor insiste en la calidad de su gestión y en no reconocer a Maduro como presidente, pues sostiene que él fue el ganador. De hecho, según el Instituto Venezolano de Análisis de Datos (IVAD), Capriles ganaría a Maduro con una ventaja de cinco puntos si se repitieran las elecciones del 14 de abril.
