Rafael Correa, parece no temer un enfrentamiento con uno de sus principales socios en la región, Hugo Chávez. El ministro ecuatoriano de Recursos no Renovables ha anunciado medidas drásticas si la petrolera venezolana PDVSA no cumple con los contratos firmados con Ecuador. La distancia entre los dos mandatarios parece expandirse después de que el país andino no formase parte de la reciente gira de Chávez por América Latina. Rafael Correa, parece no temer un enfrentamiento con uno de sus principales socios en la región, Hugo Chávez. El ministro ecuatoriano de Recursos no Renovables ha anunciado medidas drásticas si la petrolera venezolana PDVSA no cumple con los contratos firmados con Ecuador. La distancia entre los dos mandatarios parece expandirse después de que el país andino no formase parte de la reciente gira de Chávez por América Latina.
El sector petrolero ha servido para marcar distancias con Chávez. El ministro de Recursos no Renovables de Ecuador, Wilson Pastor, ha advertido que su país “tomará medidas drásticas” si la empresa Petróleos de Venezuela (PDVSA) persiste en el incumplimiento de mejorar la producción del campo petrolero Sacha, en la Amazonia, para lo cual tiene una alianza firmada con la estatal ecuatoriana Petroecuador.
En la reciente gira que el presidente venezolano realizó por America Latina, y que le llevó a visitar Argentina, Uruguay, Bolivia y Colombia, hubo una ausencia destacada. Además de no reunirse con Dilma Rousseff, con quien debe hacerlo en las próximas semanas, tampoco acudió a Ecuador.
Junto con Bolivia, que está destinada a mantener su relación con el Chávez a causa de los muchos créditos que recibe del mandatario, los de Ecuador y Venezuela fueron considerados Gobiernos cortados por el mismo patrón. Sin embargo, Correa ha ido alejándose de los modos de gobernar se sus homólogos en el cargo. Lejos de promover las expropiaciones o la nacionalización de sectores productivos, el ecuatoriano ha promovido el libre comercio y la bancarización de la población con resultados, sobre todo en el área petrolera, satisfactorio.
Las declaraciones de Pastor son una nueva mala noticia para la petrolera venezolana y un golpe para las buenas relaciones entre ambos países. Correa demuestra de esta manera que no espera nada de Chávez además de cumplir los contratos firmados. Mientras tanto, el presidente venezolano pierde uno más de sus sustentos internacionales. Chávez, cuya llegada al poder sirvió en un inicio para elevar a sus cargos a muchos presidentes de izquierda del subcontinente, ha perdido ascendente internacional.
