El cese de actividad provoca la preocupación en los mercados internacionales y en el país por las previsiones de una menor actividad. La mayor productora de cobre del mundo, la mina «La Escondida», en el norte de Chile, se enfrenta desde ayer a una huelga de sus trabajadores por tiempo indefinido. Una nueva preocupación para los mercados internacionales y para la ya débil economía del país.
«La Escondida» es operado por una sociedad en la que la multinacional australiana BHP Billiton es su principal accionista y ha respondido suspendiendo la producción por 15 días. Una medida de fuerza que hace temer un alza de precios del cobre, ya que ésta mina produce el 5% de la oferta global.
En este sentido se ha pronunciado en declaraciones que recoge el diario Clarín, Dane Davis, de Barclays, quien considera que el efecto será «imporante» tanto en «la producción y el equilibrio del mercado» como «a causa del peso simbólico».
De esta forma, las negociaciones que tengan lugar en estos momentos en «La Escondida» podrían afectar a 2,5 millones de toneladas de extracción minera de cobre en el mundo; es decir, el 12% de la producción mundial, según señaló Davis.
Además, en el caso de la economía chilena, los analistas estiman que si la huelga se prolonga un mes, provocaría una reducción del 0,2% del ya débil PIB chileno, quien se resintió en 2016 de la caída en el precio de su principal exportación y, en esta ocasión, sufriría por ofertar una menor cantidad.