El presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina, parece haber perdido fuelle en el ecuador de su mandato, al haber caído su gestión, que ahora solo aprueba el 56% de la población. Así lo recoge el diario El País, al hacerse eco de una encuesta que publicó Prensa Libre. El presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina, parece haber perdido fuelle en el ecuador de su mandato, al haber caído su gestión, que ahora solo aprueba el 56% de la población. Así lo recoge el diario El País, al hacerse eco de una encuesta que publicó Prensa Libre.
A lo largo del año que acaba de finalizar, el mandatario ha perdido 14 puntos, aunque el resultado lo coloca por encima de sus predecesores inmediatos a esta altura del mandato.
En su caso, según los medios citados, la caída tiene que ver con que el Gobierno suspende en sus principales promesas electorales (mano dura contra la criminalidad y transparencia pública). 2013 cerró con una media de 16 homicidios diarios y sobre la transparencia, muchos en Guatemala piensan que ha retrocedido durante la legislatura de Pérez Molina.
Alejandro Balcells, del Consejo para la Defensa de la Constitución (Cedecon), ha asegurado que “Guatemala ha retrocedido a consecuencia de la falta de políticas claras en la lucha contra la corrupción”. De hecho, según el informe de 2013, Guatemala ocupa el séptimo lugar del hemisferio como el país menos transparente.
Lo que tiene que ver, como ha explicado Balcelles, con la “deuda política”, o los compromisos adquiridos por los candidatos durante su campaña y que alcanzan cifras millonarias. Aunque no es el único problema, pues muchos aseguran que el presidente se deja manejar por su vicepresidenta, Roxana Baldetti.
