La Productora musical Abdala, el moderno estudio de grabación de La Habana que el Gobierno cubano creo para contentar a figuras musicales clave como Silvio Rodríguez, ha visto como las reformas económicas impulsadas por Raúl le afectaban directamente. La Productora musical Abdala, el moderno estudio de grabación de La Habana que el Gobierno cubano creo para contentar a figuras musicales clave como Silvio Rodríguez, ha visto como las reformas económicas impulsadas por Raúl le afectaban directamente. Hasta hace muy poco, esta filial artística de Cimex -la gran corporación que Fidel ideó para las operaciones exteriores de La Habana- disfrutaba de autonomía para comprar suministros en los mercados internacionales. Ahora ya no podrá hacerlo.
La mala situación de la economía cubana ha movido al Gobierno de Raúl Castro a establecer la prohibición de importar y exportar a las corporaciones y empresas nacionales. Busca de esta manera, según anunció, mejorar la balanza comercial de la Isla, realizar un parón para reorganizar los gastos e ingresos.
Esta medida afecta de manera directa a uno de los emblemas musicales de la isla, el estudio al que muchos artistas internacionales acuden, por su simbolismo, pero sobre todo por la modernidad de las instalaciones, a realizar sus grabaciones.
En el listado de empresas que verán restringida su libertad para comerciar con el exterior se encuentra al Corporación Cimex, que incluye a multitud de empresas entre las que se cuenta Producciones Abdala. En declaraciones a Cubaeconómica, un trabajador de la empresa ha asegurado que el estudio se ha visto afectado por la prohibición, pero “los artistas continúan viniendo a grabar y el estudio está abierto a quien lo desee.”
Lo cierto es que desde hace unos años, la productora depende de Cimex para adquirir en el exterior los repuestos para los aparatos de grabación con los que cuenta. La imposibilidad de importar podría provocar una paralización del estudio en momentos concretos. Por el contrario, la fuente ha asegurado que no se espera que algo así ocurra pese a la necesidad de contar con Cimex para la gestión del estudio.
En otro orden de cosas, si se concreta la Red de Productoras Discográficas que se está gestando en el marco del Alba Cultural, Producciones Abdala ocupara un lugar privilegiado en el organigrama. Se conoce, de momento, que la sede de la nueva organización será llevada a La Habana, por lo que la propia cercanía, y el simbolismo del que se vale la productora cubana, le otorgan ciertos privilegios.
La Red de Productoras, según declaraciones del miembro de Abdala, pretende la recuperación de músicas tradicionales de los países que integran el Alba. En este sentido, Cuba tiene parte del camino recorrido. Recientemente, el disco «100 Sones Cubanos», una recopilación de los ritmos que pueden escucharse en la Isla, fue galardonado con un Grammy de la música. Pese a que por el momento se está negociando, la nueva Red ayudaría a visibilizar el trabajo que ya se hace en la Isla en este sentido.
La Isla sigue apostando por la cultura, como es habitual. El festival de cine de México realizará una retrospectiva del cine cubano en el que se incluirá el visionado de 30 largometrajes y cortometrajes de ficción, animación y documentales, realizados entre 1961 y 2009. Es un gran premio para la cultura cubana, que está presente en todos los grandes acontecimientos latinoamericanos.
Como prueba de que la apuesta continúa, Cuba se prepara para uno de los eventos culturales más importantes de la Isla: la Feria Internacional del Libro que cada año atrae a numerosas personas de diversas regiones del mundo y a editorialistas de varias naciones. Como es habitual la fiesta de las letras se iniciará en La Habana el diez de febrero y se prolongará hasta el día 20 en la Fortaleza de San Carlos de la Cabaña. Desde su primera edición en 1982 este evento ha ido ganando en el favor del público cubano. Así lo demuestra el hecho de que en la pasada edición más de dos millones de personas asistieron a la Feria y adquirieron más de 900.000 ejemplares. Pero es también punto de contacto entre editoriales. En 2010 año más de cien expositores de unos 40 países estuvieron presentes en la Feria.