Unos días después de que el Gobierno argentino de Mauricio Macri anunciase que la inflación cerraría el año en un máximo del 25%, los sindicatos han exigido un alza salarial de al menos el 30%. Unos días después de que el Gobierno argentino de Mauricio Macri anunciase que la inflación cerraría el año en un máximo del 25%, los sindicatos han exigido un alza salarial de al menos el 30%.
Hugo Moyano, secretario general de la Confederación General del Trabajo (CGT) opositora, ha asegurado que los trabajadores no están dispuestos a “perder poder adquisitivo” de cara a las próximas negociaciones con los empresarios y el Gobierno que podrían tener lugar en abril. “Como la inflación estará alrededor del 30% vamos a discutir con esa base”.
Por su parte, el líder la Central de Trabajadores de Argentina (CTA), Pablo Micheli, ha asegurado que su sector pedirá alzas salariales de entre el 33% y el 35% y ha criticado al Gobierno de Macri al considerad que busca discutir sueldos de un “modo surrealista pensando en una inflación futura”.
Igualmente, no ha descartado acciones por parte de los gremios si siguen los despidos en el sector público. “De ninguna manera vamos a aceptar seguir perdiendo, porque hemos venido perdiendo ya hace un par de año poder adquisitivo y si volvemos a firmar a la baja respecto a la inflación, vamos a seguir acumulando pérdidas”.
