La crisis energética que vive Argentina en las últimas semanas entra en una nueva fase. Las restricciones de gas que afectan a la industria y también a parte de la población, y la escasez de gasolina, han soliviantado a algunos de los gobernadores provinciales del país. En un movimiento de protesta, el peronista Juan Manuel Urtubey, líder de la provincia de Salta, ha presentado ante la Justicia Federal un recurso de amparo contra las restricciones que atenazan a su región, en un momento en que las bajísimas temperaturas que reinan en Argentina obligan a la población a utilizar todos los medios a su alcance para luchar contra el frío. La crisis energética que vive Argentina en las últimas semanas entra en una nueva fase. Las restricciones de gas que afectan a la industria y también a parte de la población, y la escasez de gasolina, han soliviantado a algunos de los gobernadores provinciales del país. En un movimiento de protesta, el peronista Juan Manuel Urtubey, líder de la provincia de Salta, ha presentado ante la Justicia Federal un recurso de amparo contra las restricciones que atenazan a su región, en un momento en que las bajísimas temperaturas que reinan en Argentina obligan a la población a utilizar todos los medios a su alcance para luchar contra el frío.
La respuesta del gobierno ha sido rápida. El gabinete de Cristina Fernández, a través del interventor del Enargas, Antonio Pronsato, ha señalado que no es responsabilidad suya el que se apliquen restricciones, sino que la culpa es de la gestión de Urtubey al frente de la provincia. «No es una falta de gas sino de caño de una obra que tenía que haber concluido la Provincia y aún no la terminó. Este tampoco es un problema de la Transportadora», ha señalado Pronsato.
Responsables de la empresa distribuidora del norte argentino, Gasnor, han señalado que «no hay incumplimiento de contrato porque se están enviando los cupos mínimos permitidos por metro cúbico», en previsión de que las medidas legales emprendidas por Urtubey puedan volverse en su contra. Parte de la población y de la industria de Salta lleva desde el inicio de la semana con restricciones de gas natural justo cuando una ola de frío atenaza Argentina.
Después de que se hicieran públicos los cortes en el suministro de gas a que se exponen las grandes industrias argentinas, el país gobernado por Cristina Fernández se enfrenta a una escasez de gasolina que comienza a ser preocupante. Las razones del descenso en la oferta son principalmente dos: por un lado, la creciente expansión del mercado del automóvil en Argentina, consecuencia del fuerte crecimiento que experimenta el país desde hace unos años, y por otro los problemas sindicales y paros que se han sucedido en el Estado de Santa Cruz.
En algunas provincias, como Mendoza, las autoridades han llegado a pedir a la población que modere su consumo por el crítico estado en que se encuentra la oferta de combustible. Mientras, en otras como Córdoba, Santiago del Estero o San Juan, se han comenzado a producir cortes en el suministro de gas natural comprimido (GNC), según han afirmado medios locales. Todo ello a pesar de que la oferta de combustible ha aumentado un 5% en el último año, un dato que no ha conseguido seguir el ritmo de crecimiento de la demanda.
La preocupación entre los gobernadores de las diferentes provincias comienza pues a ser notoria. El paso adelanta dado por Urtubey podría animar a otros mandatarios a reclamar al gobierno de Cristina Fernández el fin de las restricciones.
