Las pensiones de Costa Rica, ¿en peligro?

Cuatro de los seis regímenes básicos de pensionas de Costa Rica se encuentran expuestos a un alto riesgo financiero y operativo, lo que podría amenazar los sistemas de reparto. Así lo considera al menos el Informe de coyuntura del Sistema Nacional de Pensiones. Cuatro de los seis regímenes básicos de pensionas de Costa Rica se encuentran expuestos a un alto riesgo financiero y operativo, lo que podría amenazar los sistemas de reparto. Así lo considera al menos el Informe de coyuntura del Sistema Nacional de Pensiones de marzo 2015, elaborado por la Superintendencia de Pensiones (Supén).

En concreto, se encuentran en dificultades los regímenes de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM), administrado por la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), y el Fondo de Jubilaciones y Pensiones del Poder Judicial. También se incluyen en esta lista el Transitorio de Reparto del Magisterio Nacional y los que están a cargo de la Dirección Nacional de Pensiones.

Según La Nación, que ha podido acceder al informe de la Supén, el Fondo del Cuerpo de Bomberos y el de Capitalización Colectiva de la Junta de Pensiones del Magisterio Nacional (Jupema) son los que se enfrentan a menores riesgos.

En total, los seis sistemas de jubilación básica de Costa Rica contaban el año pasado con 281.787 beneficiarios, de los que el 77% eran de IVM.

El estudio considera que los principales problemas a los que deben enfrentarse los sistemas de pensiones es la insuficiencia de recursos a un plazo mayor de 80 años y la alta concentración de las inversiones en títulos de deudas del Gobierno. Ambas se aplican al IVM, al Fondo del Poder Judicial y al dirigido por Jupema.

Róger Porras, director ejecutivo de Jupema ha explicado que “en el Congreso hay un proyecto de ley que permitiría diversificar las inversiones a obra pública y tener herramientas para cobrar a los jefes que adeudan dinero a sus trabajadores en el sector privado”.

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