Ernán López-Nussa

El pianista cubano Ernán López-Nussa ha sido capaz de conseguir algo que no está al alcance de cualquiera: ser profeta en su tierra. El pianista cubano Ernán López-Nussaha sido capaz de conseguir algo que no está al alcance de cualquiera: ser profeta en su tierra.

Con su fina pulsación, su elegante rítmica y la limpieza espectacular de sus fraseos, López-Nussa se ha hecho un hueco en el panorama musical de un país en el que abundan los grandes pianistas.

Pero pocos se habían atrevido hasta ahora, excepto algún que otro desvaría ocasional, a intentar mezclar con soltura la música de los grandes autores clásicos, con la improvisación propia del jazz y la pulsación propia de las músicas afrocubanas.

Un tipo de fusión que no resulta fácil de lograr sin que se aprecien claramente las costuras, pero a la que Ernán parece tener cogido el ‘tranquillo’ y por eso es capaz de practicarla sin horrorizar a los sufridos oyentes.

Más aún, con López-Nussa el ‘invento’ suena perfectamente natural, como si la relación entre ambos mundos fuera evidente y nadie hasta ahora hubiera sabido encontrar los nexos por los que se comunican esos universos sonoros tan distantes en apariencia.

En su último disco, ‘Sacrilegio’, el pianista se atreve a recrear obras de Beethoven, Bach y Lecuona, por ejemplo con unos resultados espectaculares. Tanto que el disco acaba de ser galardonado con el premio principal otorgado este año en ‘Cubadisco’, el gran certamen musical de la isla.

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