Brasil aplaza, al menos un año, la concesión de su ‘AVE’

El Gobierno brasileño ha anunciado un nuevo aplazamiento, de “al menos un año”, de la licitación de su primera línea de tren de alta velocidad del país, que unirá Río de Janeiro y São Paulo y en la que se han interesado empresas concesionarias de España, Francia y Alemania. El Gobierno brasileño ha anunciado un nuevo aplazamiento, de “al menos un año”, de la licitación de la primera línea de tren de alta velocidad en el país iberoamericano, que unirá Río de Janeiro y São Paulo. En el proyecto se han interesado empresas concesionarias de España, Francia y Alemania.

El presidente de la Empresa de Planteamiento y Logística (EPL), de la que depende la subasta, Bernardo Figueirido, ha comentado que este retraso se ha decidido tras hablar con los países interesados, pues España y Alemania pidieron “más tiempo”, aunque la iniciativa “sigue en pie”, según informa el diario El País. De hecho la subasta está prevista para el próximo 19 de septiembre.

La empresa que consiga la licencia se adjudicará una concesión por 40 años para operar, mantener y conservar la línea de alta velocidad y aportará la tecnología propia para el sistema ferroviario.

España es uno de los países interesados en el proyecto, ha presentado dos iniciativas, una emergente del Ministerio de Fomento y otra del fabricante ferroviario CAF. Para aumentar las posibilidades del país, el departamento que dirige Ana Pastor quiere crear un único gran grupo para competir por este contrato, con el que pretende conseguir el éxito logrado en Arabia Saudí.

Con este objetivo, España ha intensificado sus esfuerzos durante las dos últimas semanas para ‘atenuar’ el efecto del accidente del tren Alvia que tuvo lugar en Santiago de Compostela el pasado 24 de julio, según comentan varias fuentes. Para que no cunda el pánico, el ministerio brasileño de Transporte, César Borges, ha asegurado que Renfe sigue estando dentro de las posibilidades.

El tren de alta velocidad brasileño supone un contrato que rondaría los 13.000 millones de euros y que se ejecutará en dos gasas, la primera tiene un presupuesto de 2.450 millones de euros y supone la instalación de la superestructura de la línea y la explotación del servicio ferroviario por cuarenta años. La segunda subasta, actualmente sin fecha, supondrá la elección de la constructora que ejecutará las obras de infraestructura.

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