En enero y febrero se destruyeron «196 kilómetros cuadrados de selva, frente a los 523 kilómetros cuadrados del año pasado, lo que representa una caída del 63 por ciento», publicó la organización.
Respecto a la distribución geográfica, la mayoría de la deforestación se concentró en los estados de Mato Grosso (32 por ciento), Roraima (30 por ciento) y Amazonas (16 por ciento), sumando 152 kilómetros de selva destruida.
Según Imazon, en el estado de Mato Grosso la deforestación fue provocada principalmente por la extensión agrícola y ganadera, mientras que en Roraima hubo mucha tala ilegal dentro de territorios indígenas, como la tierra Yanomami, la Manoá-Pium y Raposa Serra do Sol.
El Gobierno brasileño se comprometió públicamente a alcanzar el objetivo de deforestación cero en el año 2030, pero las organizaciones ecologistas resaltan que, aunque hay avances, el objetivo aún está lejos de ser alcanzado.
La detención de Bolsonaro marca un nuevo capítulo en la crisis institucional que atraviesa Brasil,…
El entendimiento entre Codelco y la subsidiaria del conglomerado indio responde a las proyecciones internacionales…
El giro en las conversaciones entre el Ejecutivo argentino y JPMorgan, Bank of America y…
El aval del Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico marca un giro estratégico para…
El Banco de México analiza un contexto marcado por la desaceleración industrial, la moderación de…
Tras la orden ejecutiva firmada por Donald Trump, Washington elimina el 40% restante de los…