«El personal del FMI y las autoridades argentinas continuarán avanzando en su trabajo conjunto en los próximos días, con el objetivo de llegar a un acuerdo sobre la quinta revisión del programa respaldado por el Fondo», señaló Julie Kozack este jueves, de acuerdo a un comunicado de la entidad multilateral.
Las discusiones técnicas se enfocan «en un paquete de políticas para salvaguardar la estabilidad económica, en el contexto de una situación desafiante, en parte afectada por la sequía histórica» que atraviesa Argentina, puntualizó la portavoz del Fondo.
Tras una reunión informal de rutina del directorio Ejecutivo del FMI, la directora de comunicaciones especificó que las negociaciones intentan blindar las políticas macroeconómicas del país sudamericano para contribuir a la acumulación de reservas y la mejora de la sostenibilidad fiscal.
PAGO DE 2.700 MILLONES
Respecto a las obligaciones de pago asumidas por Argentina, Kozack señaló que «las autoridades argentinas continúan manteniéndose al día con sus obligaciones financieras con el Fondo».
La nación sudamericana cumplió en la víspera con un pago de 2.700 millones de dólares que debía realizar antes de fin de mes y que efectuó con yuanes y con Derechos Especiales de Giro (DEG), un activo de reserva internacional del organismo multilateral.
A principios de la semana que viene, una delegación del Ministerio de Economía encabezado por el el viceministro, Gabriel Rubinstein, y el jefe de asesores, Leonardo Madcur, y viaja a EEUU a principios de la semana entrante.
El ministro de Economía y precandidato a presidente por el oficialismo, Sergio Massa, señaló el martes que estaba tratando «de saldar la discusión del próximo semestre, o dos trimestres, con el Fondo», con la expectativa de que «en las próximas horas» se conociera «el programa con el organismo».
Argentina superó en marzo la cuarta de las 10 auditorías trimestrales del FMI que supervisan el cumplimiento del programa, en base al cual el país se comprometió a reducir el déficit fiscal a 1,9 por ciento en 2023 y 0,9 por ciento en 2024.
La nación sudamericana es la mayor deudora del FMI, después de que el organismo le entregara el mayor crédito de su historia en 2018, durante el Ejecutivo de Mauricio Macri (2015-2019).