En Río de Janeiro, la mayoría de los simpatizantes de izquierda se reunieron en la plaza de Cinelandia, donde celebraron la victoria al ritmo de la música y en clima de carnaval.
El calor veraniego obligó a prescindir de mucha ropa y no fueron pocos los que acudieron disfrazados.
Abrazos y lágrimas predominaron en la fiesta, igual que el rojo del Partido de los Trabajadores (PT).
En Sao Paulo, miles de personas se acercaron a la tradicional Avenida Paulista para celebrar la victoria de Lula da Silva.
Vestidos con camisetas, banderas y toallas rojas, ocuparon toda la avenida a lo largo de un kilómetro para bailar, tomar cerveza y cantar.
Un tradicional trío eléctrico (camión con equipos de audios e instrumentos musicales) aportó la música a la fiesta con una actuación en vivo de Daniela Mercury.
El festejo transcurrió con normalidad y los presentes cantaron el himno en ritmo de samba.