Hambre
"La crisis económica provocada por la COVID-19 ya había puesto los alimentos en los estantes de las tiendas fuera del alcance de las personas más vulnerables para cuando los huracanes 'Eta' e 'Iota' los azotaron".
Los fenómenos climáticos extremos y los efectos colaterales de la pandemia de COVID-19 han provocado que cerca de ocho millones de personas pasen hambre en El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua, una cifra que casi cuadruplica los 2,2 millones de 2018 y que anticipa, en el mejor de los casos, una recuperación "larga y lenta" para la región.