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El Tesoro argentino vuelve a usar los fondos reservados para las jubilaciones

Sin un peso

No es la primera vez y tal vez no sea la última, pero la pólemica está servida. A pesar del resultado positivo del reciente canje de deuda, el Estado argentino sigue con sus tradicionales problemas para financiarse y recurre a cualquier posibilidad para mantenerse a flote. Por ejemplo, a ‘tomar prestado’ dinero del fondo de reserva con el que cuenta la Seguridad Social para pagar las pensiones a los jubilados. No es la primera vez y tal vez no sea la última, pero la pólemica está servida. A pesar del resultado positivo del reciente canje de deuda, el Estado argentino sigue con sus tradicionales problemas para financiarse y recurre a cualquier posibilidad para mantenerse a flote. Por ejemplo, a ‘tomar prestado’ dinero del fondo de reserva con el que cuenta la Seguridad Social para pagar las pensiones a los jubilados.

El Ministerio de Economía de Argentina ha emitido dos letras del Tesoro, una en pesos y otra en dólares, que suscribirán la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses) por un monto total de 1.223 millones de pesos (251,416 millones de euros).

La emisión de la letra en pesos un vencimiento a 84 días de este año y tiene un valor nominal de 730 millones de pesos (150,069 millones de euros), con una tasa de interés del 11% anual. En cuanto a la letra en dólares, tiene un valor nominal de 125 millones de dólares (101 millones de euros), un rendimiento del 4,5% anual y vence el 22 de septiembre. Estas emisiones tienen por objeto financiar los gastos generales del Gobierno de Kirchner y provienen del fondo de garantía del sistema de jubilación.

La Seguridad Social tiene un fondo especial de garantía desde mediados de 2007, que creció en diciembre de 2008. Desde entonces, el Tesoro ha emitido deuda con vencimiento a corto plazo en varias ocasiones valiéndose de esos recursos. Según el último informe de la Anses, el valor de los activos en los que está invertido el fondo era el 30 de abril de 149.000 millones de dólares (120.523 millones de euros).

La difusión de la operación financiera ha coincidido con la fecha de inicio del debate del Congreso sobre los proyectos de ley impulsados por la oposición, que intentan mejorar los fondos de jubilación usando recursos del Anses.

La necesidad de recurrir a la caja de los jubilados para cubrir gastos demuestra que después del canje de deuda los problemas continúan. El Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner ha publicado los resultados definitivos del canje de deuda de Argentina, y aunque la situación económica se muestra claramente más favorable, todavía quedan algunas dudas sobre la visión de los inversores internacionales. Las cifras definitivas suman un total de 12.086 millones de dólares (9.776 millones de euros) en bonos que estaban en situación de impago.

El 11 de agosto comenzará la liquidación final. El Gobierno ha convenido que los inversores con acciones en bonos impagados, cuya suma era de 10.200 millones de dólares (8.250 millones de euros) recibirán la opción de descuento, mientras que aquellos que tenían bonos soberanos, por un valor de 2.660 millones de dólares (2.151 millones de euros) podrán recibir sus participaciones en metálico.

Debido a que el monto de los bonos ofrecidos bajo la opción ‘par’ superó el máximo de 2.000 millones de euros (1.667 millones de euros), el gobierno de Kirchner ha tomado la resolución de aceptar sólo el 75,3% de la participación de cada inversor con acciones en esta opción. Los bonos restantes serán automáticamente reasignados a la opción de descuento.

Con respecto a esta última opción, los inversores aceptan una reducción en el monto del principio de su inversión, pero mantienen una tasa de interés más elevada, mientras que la que reciben los inversores dentro de la opción de desembolso es mucho más baja.

Ante la resolución del canje de deuda, según analistas internacionales, queda atrás la posibilidad de un nuevo impago, al menos en el medio plazo. Además, las tasas de interés globales se mantendrán bajas por un largo periodo de tiempo. Pero todavía persisten algunas dudas sobre la evolución de la negociación del país en el exterior, y si finalmente Argentina dejará de ser considerada por los inversores en situación de riesgo de impago.

Para que esto suceda, quedan algunas cuestiones pendientes, en especial en lo relacionado con el estado irregular que Argentina mantiene con el Club de París, con una deuda que ronda los 6.000 millones de dólares.

En relación a este punto el país juega con la desventaja de que el gobierno se niega a cualquier tipo de auditoría por parte del Fondo Monetario Internacional, y el Club de París exige que toda refinanciación de deuda vencida e impagada cuente previamente con el visto bueno del FMI y la aprobación unánime de todos sus miembros.

Esta negación del Ejecutivo a someterse a la revisión del organismo internacional es el próximo obstáculo a resolver.

Sin embargo, y a pesar de ello, Argentina cuenta con una serie de ventajas como unas cuentas públicas sin sobresaltos, abundantes reservas internacionales y una recaudación tributaria creciente, dicen algunos analistas

Los cupones más atractivos para los inversores, según los analistas financieros, son el relacionado con el PIB, el Boden 2012 y el 2015.

A pesar de las turbulencias en los mercados internacionales, los bonos atados al PIB de Argentina fueron la inversión más rentable de junio, ya que ganaron un 9,86%. Los expertor señalan a los títulos públicos como los grandes protagonistas de junio, con un rebote promedio del 6,11%, según los números analizados por el Instituto Argentino de Mercado de Capitales (Iamc).

Los bonos finalizaron el mes al alza en todos los tramos de la curva de rendimiento, tanto en pesos como en dólares, y de esta manera lograron despegarse de la alta volatilidad de los mercados internacionales.

Sin una posibilidad real de impago a la vista, los títulos públicos, especialmente los nominados en dólares, de Argentina son una buena alternativa de inversión dentro de un contexto global en el que las tasas de interés se mantendrán bajas por un largo perido de tiempo, según los expertos.

De todas maneras, las perspectivas para los bonos y las acciones en el segundo semestre del año dependerá en gran medida de la evolución de los mercados internacionales. Otros analistas opinan que a pesar de que la dependencia del mercado local argentino con respecto al extranjero siempre ha sido muy alta, tras la noticia del canje de deuda disminuye.

El Gobierno ha anunciado que emitirá 950 millones de dólares (768,434 millones de euros) en nuevos bonos con vencimiento en 2017, que serán desembolsados a los inversores con la opción de descuento en lugar de en efectivo para pagos de intereses vencidos.

En cuanto a las acciones, los analistas apuntan a aquellas que están exentas de riesgo argentino, como Siderar, Tenaris o Petrobrás, o las energéticas, como Pampa o TGS. También figura entre las favoritas la empresa Telecom.

El panorama es menos favorable para las acciones bancarias, que pese a que tienen a su favor una importante lista de títulos públicos, hay ciertos factores que pueden frenar su crecimiento, como la reforma financiera que se realizará en un futuro próximo y que pondrá un límite a la actividad bancaria, según los expertos en la materia.

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