Los datos económicos de los primeros seis meses del Gobierno de Michelle Bachelet hacen que algunos sectores de Chile tengan dudas sobre el paquete de reformas del Ejecutivo y es que el Banco Central ha rebajado la proyección de crecimiento para 2014 a un rango de entre el 1,75% y el 2,25%. Los datos económicos de los primeros seis meses del Gobierno de Michelle Bachelet hacen que algunos sectores de Chile tengan dudas sobre el paquete de reformas del Ejecutivo y es que el Banco Central ha rebajado la proyección de crecimiento para 2014 a un rango de entre el 1,75% y el 2,25%.
Por su parte, el ritmo de la generación de empleo ha bajado mientras el Gobierno de Bachelet y la oposición debaten las razones de esta caída. Este debate no solo se ha convertido en tema central del sector político, sino que ha copado la atención de todos los chilenos.
Aunque el Ejecutivo asegura que la bajada de las inversiones y el crecimiento tienen que ver con factores externos, también reconoce problemas internos, como el alto precio de la energía y el precio del cobre que se mantiene a la baja y que ha parado algunos proyectos mineros.
En cualquier caso, la mandataria y sus ministros se han lavado un poco las manos en este asunto y consideran que estos problemas son anteriores a su gestión. Han señalado que el proceso de desaceleración económica comenzó en el último trimestre de 2012, en plena Administración de Sebastián Piñera.
No todos comparten estas opiniones, la derecha y los empresarios consideran que las reformas del Ejecutivo (educativa, constitucional y tributaria) han provocado un escenario de incertidumbre que está dañando la economía chilena.
“Las cifras confirman el clima de incertidumbre que se ha instalado en el país, producto de la discusión de las reformas estructurales”, ha asegurado el líder de la Sociedad Nacional de Agricultura, Patricio Crespo, tras conocer las cifras del Banco Central.
El exmandatario Piñera, por su parte ha criticado las políticas de su sucesora desde distintas tribunas. “Estamos a tiempo de enmendar el rumbo”, fue lo que señaló hace unas semanas.
Antes de conocerse estos datos, el Gobierno, con Bachelet en el centro, siguió ofertando nuevas reformas, como la creación de 11.500 empleos. Además, en aras de frenar la desaceleración, el Ejecutivo siempre ha intentado acercarse a los empresarios.