EEUU ha revisado al alza el ritmo al que creció su economía en el segundo trimestre, a una tasa anualizada del 2,5%. Así lo comenta el diario El País, que señala que este incremento es de ocho décimas respecto al dato anticipado del hace un mes. EEUU ha revisado al alza el ritmo al que creció su economía en el segundo trimestre, a una tasa anualizada del 2,5%. Así lo comenta el diario El País, que señala que este incremento es de ocho décimas respecto al dato anticipado del hace un mes.
Según el Departamento de Comercio (quien realiza todas estas previsiones) esta cifra es más del doble comparada con el 1,1% que se registró en el primer trimestre. A pesar de ello, aún está por debajo del crecimiento potencial.
Este 2,5% es la segunda lectura del indicador, que aún está pendiente de la tercera y definitiva: Wall Street esperaba una revisión al alza hasta el 2,3%. Según el tabloide español, estos datos podrían dar más argumentos a los miembros de la Reserva Federal, deseosos de reducir los estímulos económicos cuanto antes.
En cualquier caso, la tensión con Siria y el bloqueo de la negociación fiscal de Washington siguen siendo dos obstáculos a batir por la economía de EEUU.
Según parece, uno de los motivos por los que la economía estadounidense no termina de levantar el vuelo es, precisamente, el lastre fiscal, ya que la falta de acuerdo en el presupuesto ha obligado a acometer una serie de recortes en el gasto público.
En concreto, el crecimiento real de EEUU se encuentra en el 3,3% pero necesitaría llegar hasta el 5% para que hubiese un efecto real en el desempleo, que en julio bajó al 7,4% por la contracción del mercado laboral.
El indicador del Producto Interior Bruto (PIB) muestra que gran parte de la revisión tiene que ver con la balanza comercial. Las exportaciones han avanzado entre abril y junio a un ritmo mayor de lo previsto, aunque las importaciones se incrementaron a un menor. Los inventarios avanzaron también más rápido de lo esperado por el Departamento de Comercio.
El resto de los componentes no variaron mucho, lo que invita a analizar lo que está ocurriendo con cierta distancia. A pesar de ello, son muchos los que consideran que la economía estadounidense está esquivando de mejor manera de lo esperado el efecto de las medidas fiscales.