La idea de Ollanta Humala era clara: continuar la política económica de su predecesor Alan García, que consiguió un crecimiento en Perú del 8,7% en 2010. Por el momento, el nacionalista, motivado por colmar las arcas del Estado, logra aprobar el tributo a las mineras y negocia atractivos acuerdos comerciales. La idea de Ollanta Humala era clara: continuar la política económica de su predecesor Alan García, que consiguió un crecimiento en Perú del 8,7% en 2010. Por el momento, el nacionalista, motivado por colmar las arcas del Estado, logra aprobar el tributo a las mineras y negocia atractivos acuerdos comerciales.
El impuesto a las sobreganancias mineras en Perú ya es una realidad. El tributo se recaudará de las utilidades operativas, es decir el que se obtiene de disminuir a las ventas el coste de lo vendido y los gastos de operación, y no sobre las ventas, como estaba previsto. Gracias al dinero que recaude, el nacionalista podrá ejecutar los proyectos de inclusión social que prometió durante su campaña.
Sólo queda llevar a cabo las negociaciones que se centrarán en fijar los porcentajes de las regalías mineras, que serían mayores a las tasas actuales de entre el 1% y el 3% sobre las ventas. Con esta medida, el Estado recibirá cada año alrededor de 1.000 millones de dólares (740 millones de euros).
Perú es el segundo productor mundial de cobre y plata, por lo que convierte a la minería como algo vital para la economía del país. Sólo este sector aporta alrededor del 60% de los ingresos por exportaciones. Con el nuevo esquema tributario, los ingresos aumentarán de un 38,5% a un 42,7%.
La inversión total que se realizó en minería en Perú se incrementó un 71% entre enero y julio de 2011, respecto al mismo período del año 2010, con un total de 3.472 millones de dólares (2.570 millones de euros).
Las mineras Xstrata Tintaya, Yanacocha y Xstrata Las Bambas son las empresas que más invirtieron en sus proyectos, con 479 millones, 468 millones y 449 millones de dólares, aproximadamente, cada una. Por lo que, el nuevo impuesto no ha supuesto un impedimento para que se siga invirtiendo.
La minera Grupo México ha confirmado a través de su filial en Perú, Southern Copper Corporation, su interés en ampliar sus operaciones de extracción en el país. De este modo, se convierte en la primera compañía del sector que se sienta a negociar con el presidente peruano, Ollanta Humala, el impuesto de las sobreganancias mineras.
La mexicana indica que sólo el proyecto ‘Tía María’ significaría una inversión de más de 1.000 millones de dólares (702 millones de euros) y generaría 4.000 nuevos empleos durante la fase de construcción y 4.100 puestos permanentes directos e indirectos durante la etapa de operación.
Precisamente, Humala, motivado por colmar las arcas del Estado, insinuó su intención de volver a reflotar la petrolera nacional Petroperú, que lleva desde 1990 sin extraer ‘oro negro’. El objetivo es que la estatal vuelva a producir petróleo, a la vez que continúe con un plan de modernización de su principal refinería.
En estos momentos, Petroperú se dedica sólo a la refinación, almacenamiento y comercialización de hidrocarburos. La reactivación de la compañía será uno de los temas más importantes en los que trabajará todo el equipo de Gana Perú. La intención del Gobierno de Humala es la de que la petrolera retome sus tareas de explotación, producción, transporte y refinería.
Por otro lado, los acuerdos comerciales también reportarán grandes beneficios económicos para el país andino. La Comisión Europea (CE) aprobó los Tratados de Libre Comercio (TLC) con Colombia y Perú. El acuerdo pasará ahora al Consejo y al Parlamento Europeo para su aprobación definitiva. El comercio bilateral de mercancías entre la UE y Colombia y Perú juntos representó en 2010 unos 21.903 millones de dólares (16.211 millones de euros)
El TLC eliminará los aranceles para todos los productos industriales y pesqueros, ampliará el acceso al mercado de los productos agrícolas, mejorará el acceso a los contratos públicos, los servicios y los mercados de inversión, reducirá los obstáculos técnicos al comercio y establecerá disciplinas comunes en materia de derechos de propiedad intelectual, transparencia o competencia.
Otro acuerdo en camino es el TLC Perú-Panamá. Éste será ratificado por la Asamblea Nacional de Diputados el próximo mes de octubre. Una vez aprobado se procederá al trámite administrativo de intercambio de notas entre ambos países para después entrar en vigor.
Este tratado permitirá que los empresarios peruanos exporten productos del sector agroindustria, derivados de materiales de construcción, metalmecánica, uva y pisco, entre otros.
