El presidente de Perú, Ollanta Humala, ha perdido otro de sus apoyos para conseguir que continúe el proyecto minero de Conga en Cajamarca. A la reivindicación del Gobierno regional de la ciudad peruana de Cajamarca, controlado por el partido izquierdista del Movimiento de Afirmación Social (MAS), de que se paralice esta mina, se ha sumado la principal central obrera peruana. El presidente de Perú, Ollanta Humala, ha perdido otro de sus apoyos para conseguir que continúe el proyecto minero de Conga en Cajamarca. A la reivindicación del Gobierno regional de la ciudad peruana de Cajamarca, controlado por el partido izquierdista del Movimiento de Afirmación Social (MAS), de que se paralice esta mina, se ha sumado la principal central obrera peruana.
El secretario general de la Confederación General de Trabajadores (CGTP), Mario Huaman, ha pedido al Gobierno del país que escuche a las autoridades locales y organizaciones de Cajamarca y paralice la ejecución del proyecto minero de Conga, del que se encarga la peruana Yanacocha.
El líder sindicalista ha asegurado que los habitantes de la región son los que tienen más evidencias de que los recursos hídricos van a verse afectados por esta mina si finalmente se lleva a cabo.
Los campesinos del lugar han estado denunciando, desde que se aprobó el proyecto, que esta explotación afectaba de forma negativa a sus comunidades, ya que desaparecerían importantes fuentes de agua, un bien utilizado para regar sus cosechas.
El presidente peruano ha respondido a la petición del sindicato, que una vez anunciado el aval para Conga, hecho que ya se ha producido, el Estado de derecho impide cancelar el proyecto. Además gracias a los impuestos que se obtendrán de este proyecto se podrán financiar las reformas sociales.
Humala ha aseverado también que su Gobierno velará en todo momento para que Yanacocha mantenga los recursos hídricos de Cajamarca.
En CGTP han desestimado el argumento aportado por el líder peruano de que no se pueden revocar las concesiones ya que esto supondría que los casos de privatizaciones corruptas quedarían impunes y Humala no podría cumplir con su promesa electoral de terminar con la corrupción en el país.
El Gobierno de Perú también teme que las inversiones en minería puedan verse afectadas, lo que repercutiría negativamente en la economía del país. Sobre todo si se tiene en cuenta que la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (Snmpe) ha estimado que existe el riesgo de perder la continuidad de las inversiones en Cajamarca por un valor de 9.641 millones de euros (7.015 millones de euros).
Por otro lado, Huaman ha pedido a Humala que se realice un nuevo Estudio de Zonificación Económica Ecológica, ya que el que se hizo con anterioridad fue pagado por la minera Yanacocha, encargada del proyecto de Conga. El presidente del país hasta el momento no se ha pronunciado con respecto a esta última petición.
En la CGTP están dispuestos a llegar hasta el final y han anunciado que apoyarán las manifestaciones que se realicen contra el proyecto minero cuprífero y aurífero Conga si el presidente Ollanta Humala no escucha los reclamos de los ciudadanos.
Pero Humala, por el momento se mantiene firme con su postura, y ha asegurado que no aceptará presiones de nadie ni ultimátums para solucionar los conflictos entre las mineras y las comunidades.
Está previsto que para el próximo jueves se produzca una Huelga general para reivindicar contra el proyecto, en el que participará el sindicato y el Gobierno regional, presidido por Gregorio Santos.
Esta manifestación, si finalmente se produce, se sumaria a la ya organizada por la Confederación Nacional de Pensionistas y Jubilados de Perú (Conadepen), que marcharon por las calles de Tacna para llevar un memorial hasta la sede de Gobernación para exigir a Humala un aumento de sus pensiones. Parece ser que los dolores de cabeza van a continuar para Humala.