La economía brasileña ha subido más de lo esperado pese a la desaceleración en las ventas minoristas, según han mostrado los datos del Banco Central Brasileño, lo que sugiere una leve recuperación. La economía brasileña ha subido más de lo esperado pese a la desaceleración en las ventas minoristas, según han mostrado los datos del Banco Central Brasileño, lo que sugiere una leve recuperación.
Unos datos que facilitan el anuncio de la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, que ha aclarado que el Mercosur ya está listo para presentar en enero su oferta comercial a la Unión Europea, en medio de las negociaciones sobre un acuerdo entre ambos bloques.
«Debemos buscar elevar nuestro comercio a un nuevo nivel, tanto en términos de cantidad como de equilibrio», ha dicho Rousseff en el Encuentro Económico Franco-Brasileño, en la Federación de Industrias del Estados de Sao Paulo, en la que ha participado el presidente francés, François Hollande.
Asimismo, ambos dirigentes han promovido una mayor cooperación bilateral en alta tecnología y ciberdefensa, áreas que consideraron claves para el desarrollo y la «protección de la soberanía», dos puntos esenciales para la presidenta brasileña que ha sido víctima directa y personal de ese espionaje. Además de la necesidad de reforzar la cooperación tecnológica para dar una mayor solidez a la “alianza estratégica” que ambos países mantienen desde 2006.
Estos avances llegan en un momento de “tensión” dentro del partido de Rousseff que ha manifestado su desacuerdo por los comentarios del Ministro de Hacienda, Guido Mantega, que también lo fue del expresidente Lula da Silva, por decir que la economía de Brasil está creciendo con las “piernas cojas” y por los estudios de medidas en el sector automovilístico.
Para la presidenta, el análisis no es «adecuado» y da lugar a críticas de la oposición. Tampoco está de acuerdo con los comentarios del ministro sobre el delicado tema respecto a la ley de seguridad en los coches, que exige que tengan doble airbag y frenos ABS, ya que estas afirmaciones generan interpretaciones negativas, por lo que pide que el ministro explique a la prensa que las medidas aún se están estudiando.
