En Argentina las empresas son conscientes que su destino depende, en parte, de las relaciones que mantengan con la familia que Gobierna el país, los Kirchner. El bando en el que juegues la partida es decisivo, por eso en el país latinoamericano tienen claro que las compañías están divididas en dos grupo, las que tienen el apoyo del entorno presidencial, como las empresas de la familia Eskenazi, y las que se han alejado de la órbita de los Kirchner, como el holding empresarial Techint que dirige la familia Rocca, que ahora le toca pagar la factura. En Argentina las empresas son conscientes que su destino depende, en parte, de las relaciones que mantengan con la familia que Gobierna el país, los Kirchner. El bando en el que juegues la partida es decisivo, por eso en el país latinoamericano tienen claro que las compañías están divididas en dos grupo, las que tienen el apoyo del entorno presidencial, como las empresas de la familia Eskenazi, y las que se han alejado de la órbita de los Kirchner, como el holding empresarial Techint que dirige la familia Rocca, que ahora le toca pagar la factura.
La mala relación de Techint con el Gobierno argentino comenzó cuando Cristina Fernández no movió ficha para impedir que Hugo Chávez nacionalizara la acería Sidor en Venezuela, filial de la compañía argentina. Techint reclamó a la mandataria unas negociaciones más activas para defender las inversiones de los empresarios de su país en el extranjero, pero Cristina no actuó al gusto de la compañía, que terminó por mostrar su indignación a los cuatro vientos.
Las relaciones nunca se recompusieron y ahora los Kirchner se enfrentan de nuevo al Grupo Techint. El Gobierno ha bloqueado la salida de un barco de Techint, cargado con una partida de tubos, en el puerto de Campana, donde se encuentra la fábrica de la compañía. Según el ejecutivo provenía de las Malvinas, sin embargo la empresa lo ha negado.
El diario argentino “Clarín” asegura que el comunicado del ministerio de Relaciones Exteriores, que no menciona a Techint pero hace obvias referencias al mismo, afirma que existen evidencias que dicho buque, identificado como Thor Leader, habría sido utilizado para el abastecimiento de insumos vinculados a las actividades de la industria petrolera promovidas ilegítimamente por el Reino Unido, con el que la Argentina se encuentra embarcada en una fuerte escalada bilateral por el inminente inicio de las actividades de exploración de hidrocarburos en el archipiélago.
Desde Techint han asegurado que el barco no ha partido de Malvinas ni estaba previsto que lo hiciera hacia allí, sino que fie contratado para llevar la carga de tubos con destino a diferentes puertos del Mediterráneo. Según la compañía, para cinco clientes sin operaciones en Malvinas. La familia Rocca ha querido dejar claro que no tiene vínculos con las Islas Malvinas.
Un grupo de diputados argentinos han llegado al extremo de presentar un proyecto de resolución en el que reclaman al Gobierno que sancione a Tichenit por este incidente. Los diputados han expresado su malestar con la empresa Tenaris-Siderca propiedad del Grupo Techint por pretender enviar un cargamento de tubos sin costura a través de un buque de bandera extranjera, utilizado para el abastecimiento de materiales vinculados a las actividades de la industria petrolera promovidas ilegítimamente por el Reino Unido en aguas de mar argentino.
Los diputados que firman el comunicado, Héctor Recalde, Omar Plaini y Octavio Arguello, han pedido a los organismos del Estado que procedan a la sanción más enérgica que prevean los códigos y legislación vigente, en defensa de la soberanía y el pueblo argentino.
Esta misma semana la siderúrgica Ternium, controlada por el conglomerado argentino Techint, ha asegurado que aún no ha recibido los pagos en compensación por la estatización de la acería venezolana Sidor previstos para principios de esta semana.
Sidor fue re estatizada en 2008, y la Corporación Venezolana de Guayana (CVG) debía concretar un pago por 157,5 millones de dólares más intereses bajo el primer tramo y 141,5 millones de dólares de prepago obligatorio más intereses en el segundo tramo, dijo Ternium en una nota. «Según los acuerdos pautados para la transferencia de los intereses de Ternium en Sidor a Venezuela, la CVG tiene 15 días para concretar el pago bajo cualquier tramo».
El acuerdo de compensación de Venezuela a Ternium por la nacionalización de Sidor fue de unos 2.000 millones de dólares en total. La acería está ubicada en el suroriental estado venezolano de Bolívar. La producción de Sidor se desplomó tras su nacionalización y la crisis energética del país.