El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha informado este lunes de que once personas han sido detenidas por el asalto en la madrugada del domingo a un puesto militar en el estado sureño de Bolivar, y ha pedido a Brasil que «los asaltantes» que han logrado escapar sean capturados, así como las armas del Ejército venezolano que han sido robadas sean devueltas. «Pido al Gobierno y a las autoridades de Brasil la detención de estos asaltantes y que se devuelva al Gobierno de Venezuela el resto de las armas que han sido robadas», ha pedido el presidente Maduro.
El Gobierno ha señalado que entre los asaltantes se encuentra Darwin Balaguera, antiguo miembro de la Guardia Nacional y calificado como desertor por las autoridades de Venezuela.
«Ya hemos capturado a 11 asaltantes. Al gobierno de Brasil le digo que las armas venezolanas han sido robadas en un asalto terrorista. Señor Jair Bolsonaro, tenemos información de que estas armas están en territorio brasileño», ha insistido Maduro durante una rueda de prensa de la que se ha hecho eco la cadena de televisión Telesur.
El ministro de Comunicación e Información, Jorge Rodríguez, ha explicado horas antes de la intervención del presidente Maduro que el objetivo de este asalto era robar armas del Ejército venezolano para ser utilizadas en actos terroristas que sirvieran de excusa «para que Estados Unidos pudiera intervenir militarmente contra Venezuela».
Rodríguez ha acusado al Gobierno de Colombia de tener conocimiento de estos actos, declaraciones que desde Casa de Nariño han sido calificadas de «infundadas» y «malintencionadas», al mismo tiempo que han pedido a la «comunidad internacional» que preste atención a las «temerarias acusaciones» del «régimen ilegítimo de Nicolás Maduro», que «sólo busca distraer la atención frente a los graves problemas domésticos inventándose enemigos externos».
Rodríguez ha informado de que han desmantelado «el plan Navidad sangrienta del grupo derechista de Juan Guaidó», el cual, ha asegurado, «ha encontrado participación» de Perú y de Brasil también. Ambos países lo han negado.
De acuerdo con el Gobierno de Venezuela, durante el ataque a la base militar de Bolivar murió un soldado venezolano y unos 120 fusiles fueron robados por los «asaltantes», así como nueve lanzacohetes RPG.
Por su parte, habitantes de la comunidad Kumarakapay en Bolívar han denunciado este lunes que los militares venezolanos, en el marco del operativo de defensa de la base militar atacada, detuvieron y registraron las viviendas de varias personas del asentamiento indígena.