El presidente saliente de Argentina, Mauricio Macri, ha escenificado este sábado su despedida del poder en un acto en la Plaza de Mayo de Buenos Aires en el que ha prometido al presidente electo, Alberto Fernández, que «va a tener una oposición constructiva». «Tenemos que cuidar a nuestra Argentina de que no la roben ni la maltraten», ha declarado Macri ante miles de personas congregadas para el acto, celebrado tres días antes del relevo presidencial, previsto para este martes, informa el diario ‘Clarín’.
Macri se despidió de la Casada Rosada desde un pequeño escenario en la histórica plaza porteña con un acto de 15 minutos en el que fue el único orador. Fernández «va a encontrar después de mucho tiempo una oposición firme y severa que va a defender la democracia, la calidad institucional y nuestras libertades», ha apuntado.
Más duro fue Macri con la vicepresidenta electa, Cristina Fernández de Kirchner, aunque sin mencionarla. «Todos queremos una justicia independiente que se base en la ley y no en los discursos políticos», ha afirmado en referencia a la intervención de Cristina durante la última vista de uno de los juicios abiertos contra ella por corrupción. Poco antes, los simpatizantes de Macri habían coreado la frase «¡La queremos presa!».
Además de la primera dama, Juliana Awada, también estaban su compañero de fórmula en las elecciones, Miguel Pichetto, casi todos los ministros, la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal y el jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta.
Entre los aliados fueron mayoría los de la Coalición Cívica, mientras que no hubo presencia de radicales. De hecho, Macri apenas se refirió a sus socios políticos en su discurso. «Gracias a todos por tanto amor y convicción y al equipo de gobierno, que ha sido maravilloso. Gracias a todos los integrantes de Juntos por el Cambio», apuntó escueto.
Además, Macri ha defendido la necesidad de un espacio opositor unido frente a quienes aspiran abiertamente a arrebatarle el liderazgo de la oposición. «Me da tristeza sentir que muchos están angustiados, pero no tienen que estar angustiados: estamos acá todos juntos y así va a ser», dijo.
El mandatario saliente ha aprovechado además para hacer balance de sus años de gestión, «mucho más difíciles de lo que imaginé». «Siempre en minoría, con muchos palos en la rueda pero logramos mucha cosas», indicó.