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Ciencia y razón

El problema energético

El Gobierno español ha adoptado en fecha reciente, unas medidas de ahorro energético que la opinión pública ha recibido entre rechazo y perplejidad. Pero ello ha servido para recordarnos, una vez más, el problema energético. Y nos ha puesto delante de los ojos el recuerdo de que España es un país que necesita importar la energía que consume. Todo ello nos ha hecho recordar la energía nuclear, tan denostada en muchos países por grupos ecologistas que, incluso, han llegado a formar partidos políticos. Todo ello nos ha hecho también recordar los accidentes, alguno de ellos muy grave que ha ocasionado esta forma de energía. El más grave, sin duda, se produjo en 1986, en la entonces Unión Soviética: Chernóbil. Que aparecerá siempre como una palabra maldita en el desarrollo de esta forma de energía. El Gobierno español ha adoptado en fecha reciente, unas medidas de ahorro energético que la opinión pública ha recibido entre rechazo y perplejidad. Pero ello ha servido para recordarnos, una vez más, el problema energético. Y nos ha puesto delante de los ojos el recuerdo de que España es un país que necesita importar la energía que consume. Todo ello nos ha hecho recordar la energía nuclear, tan denostada en muchos países por grupos ecologistas que, incluso, han llegado a formar partidos políticos. Todo ello nos ha hecho también recordar los accidentes, alguno de ellos muy grave que ha ocasionado esta forma de energía. El más grave, sin duda, se produjo en 1986, en la entonces Unión Soviética: Chernóbil. Que aparecerá siempre como una palabra maldita en el desarrollo de esta forma de energía.

Pero, pese a todo, la energía nuclear sigue siendo un protagonista en nuestro mundo, Las noticias que nos llegan son continuas. Por ejemplo, la Seguridad Nuclear de Suiza ha aprobado, con ciertas condiciones, los tres emplazamientos propuestos por la industria de aquel país para construir tres nuevas centrales nucleares, que sustituyan a las actuales. En este momento, el 95% de la electricidad en Suiza se genera en centrales hidráulicas y nucleares, no emisoras de gases de efecto invernadero. Por otra parte, Electricité de France (EDF), propietaria de British Energía, que es la titular de las centrales nucleares británicas, excepto las de gas-grafito y uranio natural (llamadas Magnox), ha anunciado su intención de prolongar la vida operativa de las centrales nucleares. Además, la Comisión de Energía Atómica de Pakistán (PAEC) y la Corporación Nuclear Nacional China (CNNC) han firmado un contrato para el suministro a Pakistán de una unidad nuclear de 1.000 MW, que será construida en el emplazamiento de Chashman, sobre el río Indo. Por otra parte, el Organismo Internacional de Energía Atómica ha aprobado la creación de un Banco Internacional de Uranio ligeramente enriquecido, para proporcionar este material a Estados miembros, que experimenten dificultades en obtener suministros en el mercado comercial por razones excepcionales, técnicas o políticas, siempre que cumplan las condiciones de no proliferación que requiere el OIEA.

Todos estos datos nos hacen pensar, una vez más, en las posibilidades de la energía nuclear. En este momento, la energía se encuentra subordinada, en gran parte, al gas y al petróleo, lo que crea grandes dificultades cuando surgen, como está pasando ahora, conflictos políticos en los países exportadores. Por otra parte, las energías renovables, como la solar y la eólica, no cubren las necesidades energéticas de una sociedad industrializada como la presente. Además, en un futuro muy difícil de definir, el petróleo se acaba. Por todo ello, parece aconsejable el uso, cada vez más intenso de la energía nuclear.

Muchos países prohibieron la energía nuclear, la declararon en moratoria o jamás la desarrollaron. Otros en cambio, Francia a la cabeza, producen más de una tercera parte de su electricidad con centrales nucleares. Son, Bélgica, Suecia, Suiza, Corea del Sur, Japón, etc.

Ahora el futuro puede estar en el CERN (Centro Europeo de Investigación Nuclear). Allí, la energía que se llegara a concentrar cuando dos protones choquen es tal que no hay en la actualidad escenario natural en que se dé: sólo tuvo lugar al inicio del universo.

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