Un nuevo escándalo salpica al Gobierno de Temer

El presidente interino de Brasil, Michel Temer, vuelve a verse salpicado por la corrupción. Tras la dimisión de su ministro de Planificación, Romero Jucá, ahora es el ministro de Transparencia, Fabiano Silveira, el que está en la cuerda floja por unas escuchas telefónicas. El presidente interino de Brasil, Michel Temer, vuelve a verse salpicado por la corrupción. Tras la dimisión de su ministro de Planificación, Romero Jucá , ahora es el ministro de Transparencia, Fabiano Silveira, el que está en la cuerda floja por unas escuchas telefónicas.

Las grabaciones, que han sido difundidas por el canal de televisión Globo y que recogen medios latinoamericanos, muestran a Silveira (cuando aún era miembro del Consejo Nacional de Justicia) criticando la investigación en la empresa estatal Petróleos Brasileños (Petrobras) y sugiriendo estrategias de defensa para algunos sospechosos.

Habla con el presidente del Senado, Renán Claheiros, salpicado por el caso de corrupción de la petrolera, y con Sergio Machado expresidente de la empresa estatal Transpetro y colaborador de la trama. Silveira aconseja a ambos cuáles deben ser sus respectivas defensas, aunque ahora que las grabaciones han visto la luz asegura que era una conversación “informal” que de ninguna manera sugiere interferir con las instituciones públicas a favor de otras personas.

Al hacerse pública esta información, decenas de afiliados al sindicato que agrupa a los trabajadores del Ministerio de Transparencia, Fiscalización y Control, se han manifestado en las calles de Brasilia para exigirle a Temer que destituya a Silveira de modo fulminante.

El caso Petrobras se está convirtiendo en una enorme piedra en el camino para Michel Temer, que asumió el cargo tras la destitución de Dilma Rousseff después de que el Congreso y el Senado dieran luz verde al juicio político. Rousseff, apartada del cargo por 180 días, aún tiene apoyos que se han echado a la calle para pedir unas elecciones presidenciales pues no están de acuerdo con que Temer (que no ha pasado por las urnas) se convierta en presidente.

Por su parte, el presidente interino ha preferido no decir nada aún sobre estas nuevas informaciones y pretende seguir con sus reformas y medidas para sacar a Brasil de la enorme crisis en la que se encuentra. Medidas que han sido muy criticadas y que prometen serlo más, puesto que el equipo económico de Temer ha apostado por algunos planes que no serán del agrado de la sociedad brasileña.

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