El exdirector del área internacional de la petrolera estatal Petróleos Brasileños (Petrobras), Néstor Cerveró, ha acusado a la presidenta Dilma Rousseff y a su antecesor Luiz Inácio Lula da Silva, de haber nombrado cargos en la empresa y sus subsidiarias para devolver algunos favores. El exdirector del área internacional de la petrolera estatal Petróleos Brasileños (Petrobras), Néstor Cerveró, ha acusado a la presidenta Dilma Rousseff y a su antecesor Luiz Inácio Lula da Silva, de haber nombrado cargos en la empresa y sus subsidiarias para devolver algunos favores.
Cerveró, que dirigió el área internacional de Petrobras entre 2003, ha declarado este miércoles ante la Fiscalía que la presidenta Rousseff había ofrecido en 2013 al senador y al expresidente Fernando Collor la presidencia de todas las áreas de BR Distribuidora, un de las principales subsidiarias de Petrobras.
No es la primera vez que Cerveró señala a la mandataria como parte de la trama corrupta. Anteriormente la había acusado de haber financiado su campaña electoral de 2014 con fondos de Petrobras.
Sobre Lula, el exdirector ha asegurado que le nombró a él mismo en 2008 como director financiero de BR en “reconocimiento a la ayuda” que el funcionario prestó para saldar ilícitamente un crédito de 2,5 millones de reales contraído indirectamente por el Partido de los Trabajadores (PT) con el banco Schahin.
