Standard & Poor’s está atravesando momentos difíciles: el Departamento de Justicia de EEUU busca una indemnización multimillonaria por su parte tras acusarla de haber asumido un rol decisivo en la crisis de las ‘hipotecas subprime’. La calificadora busca obtener el perdón de Barack Obama mediante el acercamiento a aliados políticos de la Casa Blanca de la talla de François Hollande. Standard & Poor’s está atravesando momentos difíciles: el Departamento de Justicia de EEUU busca una indemnización multimillonaria por su parte tras acusarla de haber asumido un rol decisivo en la crisis de las ‘hipotecas subprime’. La calificadora busca obtener el perdón de Barack Obama mediante el acercamiento a aliados políticos de la Casa Blanca de la talla de François Hollande.
Este jueves, Standard & Poor’s ha emitido un comunicado aplaudiendo la reforma laboral del socialista francés –que tiene poco que ver con la de Mariano Rajoy- y ha dicho que aunque de momento no se plantea subir de nuevo el rating del país, Francia va a poder reducir de este modo los costes laborales y ganar, con ello, productividad. En palabras más sencillas: que bien hecho.
Las palabras de los analistas de Standard & Poor’s llegan un día después de que Maurice «Morry» Taylor, el presidente del grupo estadounidense Titan, un fabricante de ruedas para vehículos agrícolas, escribiese una carta al ministro de Recuperación Industrial francés, Arnaud Montebourg, en la que explica sin tapujos sus razones para no adquirir la fábrica de Goodyear en Amiens-Nord, amenazada de cierre inminente.
En la misiva, que ha sido desvelada por el portal del diario económico Les Echos, se pueden leer las siguientes afirmaciones: «He visitado la fábrica varias veces. Los empleados franceses cobran salarios altos pero no trabajan más de tres horas. Tienen una hora para las pausas y para comer, hablan durante tres horas y trabajan otras tres. Se lo he dicho a la cara a los sindicalistas franceses. ¡Y me han respondido que en Francia las cosas son así!». El presidente de Titan concluye: «Muy pronto en Francia todo el mundo se pasará el día sentado en los bares bebiendo vino tinto».
Arnaud Montebourg, conocido como ‘El Desglobalizador’ por sus intentos de proteger a la industria francesa de la competencia desleal de países sin derechos laborales ya había anunciado de forma discreta que Titan renunciaba a quedarse con la planta de Amiens, sin explicar los motivos. La brutal respuesta de Taylor ha consistido en fustigar los métodos de producción galos, la arrogancia del Gobierno socialista y la «locura» de los sindicatos.
Por eso las palabras de apoyo a Hollande pronunciadas desde Standard & Poor’s tan sólo un día después de que «Morry» Taylor haya dicho lo que ha dicho son cuanto menos significativas; la calificadora parece estar enfrentándose a un discurso que no hace demasiado tiempo también sostenía. «Morry» Taylor es además enemigo político de Obama. El empresario fue candidato a las primarias republicanas de 1996 y hace poco afirmó que si el mandatario demócrata era elegido de nuevo presidente se tendría que presentar para arreglar, a cuatro años vista, todo lo que fuese a estropear.
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