El expresidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, declarará junto a otras 11 personas como testigo de la defensa del empresario Alexandre Paes dos Santos, uno de los 16 empresarios acusado de cometer crímenes fiscales a través de la empresa estatal Petróleos Brasileños (Petrobras). El expresidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, declarará junto a otras 11 personas como testigo de la defensa del empresario Alexandre Paes dos Santos, uno de los 16 empresarios acusado de cometer crímenes fiscales a través de la empresa estatal Petróleos Brasileños (Petrobras).
No es la primera vez que la Justicia brasileña señala al exmandatario por uno de los casos de corrupción más sonados en la historia del país que preside Dilma Rousseff. Durante el año pasado más de una vez se ha especulado con la posible implicación del político en el entramado corrupto.
El pasado mes de octubre, la empresa de promoción de eventos deportivos Touchdown y propiedad de su hijo Luis Claudio Lula da Silva, fue registrada por la Policía Federal en una de las fases de la operación.
El caso de Paes dos Santos también involucra, presuntamente, a la familia Lula da Silva. Pues el empresario está siendo investigado por haber conseguido una serie de beneficios fiscales a cambio de sobornos durante el Gobierno de Lula. Paes dos Santos se une a varios miembros del oficialista Partido de los Trabajadores (PT) de Lula y Rousseff que están bajo investigación por el caso de corrupción en la petrolera estatal.
Aunque no son los únicos, pues según informó América Economía a finales del año pasado, en este caso ya están involucradas más de 20 empresas a las que el Gobierno brasileño, en medio de su peor crisis por la dudas que pesan sobre Rousseff, tienen bajo lupa.
