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Los principales empresarios españoles convencidos de que la historia de éxito de España puede continuar

Las empresas que conforman el Consejo Empresarial para la Competitividad (CEC), entre ellas Telefónica, El Corte Inglés, Mango, Banco Santander, Repsol, La Caixa, BBVA, Inditex, MAPFRE, ACS, Ferrovial o Iberdrola, se han mostrado convencidas de que la historia de éxito de España en los últimos 50 años tendrá seguimiento si se profundiza en las reformas emprendidas y se utilizan las fortalezas de la economía para favorecer el crecimiento. Las empresas que conforman el Consejo Empresarial para la Competitividad (CEC), entre ellas Telefónica, El Corte Inglés, Mango, Banco Santander, Repsol, La Caixa, BBVA, Inditex, MAPFRE, ACS, Ferrovial o Iberdrola, se han mostrado convencidas de que la historia de éxito de España en los últimos 50 años tendrá seguimiento si se profundiza en las reformas emprendidas y se utilizan las fortalezas de la economía para favorecer el crecimiento.

Fernando Casado, director del Consejo Empresarial para la Competitividad (CEC), compuesto por quince entidades que representan el 35% del PIB español, se ha mostrado seguro de que España recuperará la senda de crecimiento siempre que se profundice en las reformas económicas. Casado ha hecho estas declaraciones en la presentación del informe ‘Fortalezas y perspectivas de la economía española’.

En la rueda de prensa ante los medios, que se ha realizado en la sede de Telefónica, Casado ha abogado también por realizar reformas adicionales durante los próximos meses “para mantener la confianza extranjera” en España, ya que “todo lo que sea retrasar (los ajustes fiscales) conlleva una percepción de nuestro país que no es la que debería ser”. Además, ha señalado que los miembros del Consejo prefieren que los recortes se lleven a cabo “sobre el gasto corriente y no sobre la inversión”.

En este sentido, Casado ha hablado del elevado endeudamiento regional y ha dicho no descartar que el déficit público sea algo superior al 6% marcado para 2011, desde el 9% registrado en el ejercicio anterior. No obstante, ha considerado que “todo lo que sea acercarse a esa cifra es positivo” y debe entenderse como un “esfuerzo sustancial” de las administraciones.

El director del CEC también ha considerado necesario dotar de mayor flexibilidad a la negociación colectiva, con el objetivo de reducir la dualidad entre trabajadores en el mercado laboral, reforzar la flexibilidad interna de las empresas y vincular el incremento salarial no sólo al IPC, sino también a la productividad, ya que eso no perjudicaría al entramado corporativo español.

Además, ha señalado que con el esfuerzo de todos los actores de la economía española se conseguirá cambiar el rumbo y volver a la senda de crecimiento previa a la crisis.

Informe. Todas estas opiniones se basan la principal conclusión del informe, que dice que España podrá continuar con su historia de éxito si se profundiza en las reformas emprendidas y se utilizan las indudables fortalezas de su economía para favorecer el crecimiento, ganar en competitividad, restablecer la confianza de los mercados y reducir la prima de riesgo que penaliza a las empresas españolas.

A este respecto, el informe señala que las principales fortalezas de nuestro país se encuentran en la sólida estructura empresarial, cuyo liderazgo en diversos sectores, junto a la internacionalización, será uno de los factores clave para el cambio de rumbo, y en el hecho de que España sigue siendo uno de los países más atractivos para la inversión internacional, ya que el índice bursátil de referencia, el Ibex 35, es el selectivo que ofrece la mayor rentabilidad para el accionista, incluso después de la crisis.

Según Casado, este ‘think tank’, que se creó para buscar soluciones a la difícil situación económica de España, está dispuesto a ayudar a las ‘pymes’ para que puedan internacionalizar su negocio con su ‘know how’. Los pasos a seguir para ello se recogerán en un informe, que tienen previsto publicar en octubre.

España no es sólo construcción

Casado ha apuntado que en los últimos años ha habido un importante desarrollo económico, incluso sin la influencia del sector de la construcción. Este desarrollo es el que ha propiciado que nuestro país se convierta en la quinta economía más grande de la Europa de los 15 y que se haya posicionado como el cuarto PIB per cápita más elevado, también entre los países de la UE15, sólo por detrás de Alemania, Reino Unido y Francia.

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