Las autoridad monetaria de Brasil decretará esta semana un aumento en las tasas de interés en la reunión de los días 8 y 9 de junio, según la opinión mayoritaria de los analistas. Con esta medida se contribuirá a que bajen los precios y se apaciguará la demanda interna para evitar el riesgo de recalentamiento económico. Así, se espera que el incremento de los tipos ‘overnight’ sea del 0,75%, mientras que la tasa de referencia quedaría crecerá en el 10,25%. Las autoridad monetaria de Brasil decretará esta semana un aumento en las tasas de interés en la reunión de los días 8 y 9 de junio, según la opinión mayoritaria de los analistas. Con esta medida se contribuirá a que bajen los precios y se apaciguará la demanda interna para evitar el riesgo de recalentamiento económico. Así, se espera que el incremento de los tipos ‘overnight’ sea del 0,75%, mientras que la tasa de referencia quedaría crecerá en el 10,25%.
Un grupo de expertos consultados por esta institución ha expresado que 2010 finalizará con una tasa de inflación interanual del 5,64%. Hace apenas una semana, estos mismos economistas habían vaticinado que este índice sería del 5,67%. Es un índice algo superior a la meta de inflación anual que se marca la autoridad monetaria para el año 2010, meta fijada en el 4,5% con una tolerancia de dos puntos porcentuales por encima o por debajo.
Además, el estudio ha establecido que la nación suramericana experimentará una expansión económica del 6,6%, frente al 6,47% que los analistas habían vaticinado hace una semana.
Con respecto al mes anterior, la inflación se desaceleró en mayo debido a un menor aumento de los precios de los alimentos. Así, según el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística, la inflación medida por el IPCA avanzó a 0,43% en mayo frente al 0,57% de abril.
Un especialista consultado por Bloomberg, por su parte, señaló que estos pronósticos toman también en cuenta la posibilidad de que la crisis financiera europea pueda contraer la economía de las naciones emergentes.
Hace unas semanas, algunos analistas manifestaron que la mayoría de las economías latinoamericanas, incluida la brasileña, no se verán significativamente perjudicadas por el descalabro financiero de la zona euro y que, por el contrario, el riesgo que enfrentan estos países es el de ‘recalentamiento’, debido a sus elevados gastos públicos.
Según un análisis realizado por la Fundación Gertulio Vargas, la inflación se ha desacelerado en un 0,21% en siete de las principales ciudades brasileñas durante la última semana de mayo, frente al 0,47% registrado la semana previa.
Además, la rentabilidad de la tasa de interés del contrato a futuro a 2011 se ha incrementado en dos puntos básicos.
