Hoy expira el plazo que pactaron la guerrilla de las FARC y el Gobierno de Colombia para liberar al general Rubén Darío Alzate y a sus dos acompañantes, pero lo hace en medio de recriminaciones, pues las FARC acusan al presidente Juan Manuel Santos de haber dañado el diálogo de paz. Hoy expira el plazo que pactaron la guerrilla de las FARC y el Gobierno de Colombia para liberar al general Rubén Darío Alzate y a sus dos acompañantes, pero lo hace en medio de recriminaciones, pues las FARC acusan al presidente Juan Manuel Santos de haber dañado el diálogo de paz.
Precisamente lo ha hecho el líder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, Rodrigo Londoño Echeverri, Timochenko, que ha considerado que las últimas decisiones tomadas por el mandatario han supuesto un deterioro en los diálogos que han tenido lugar en La Habana.
En su opinión, como señala la prensa latinoamericana, las negociaciones “no podrán reanudarse así sin más, pues será necesario hacer diversas consideraciones”. Sus razones para estas críticas tienen que ver con que, desde su punto de vista, el mandatario no ha respetado las condiciones pactadas con las FARC para liberar al general y a las otras cuatro personas que siguen apresadas.
Las condiciones incluyen que se suspenda la actividad militar en las zonas previstas para la entrega, algo que no se está cumpliendo. En su opinión, Santos está llevando a cabo una operación militar que no respeta lo pactado entre ambas partes.
En el comunicado de Timochenko se queja de que esto es algo similar a lo que ocurre en la mesa de diálogo. “Santos pacta los protocolos, pero insiste en arrebatar por la fuerza los prisioneros, obstaculizando objetivamente el cumplimiento de los acuerdos. Es decir, viola de nuevo lo pactado”.
