La Policía detiene a Lula por el caso Petrobras

La Policía Federal brasileña ha decidido detener al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva tras haber registrado sus casas. Las autoridades han asegurado que tras la investigación hay indicios que unen al mandatario brasileño con el caso de corrupción de Petrobras. La Policía Federal brasileña ha decidido detener al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva tras haber registrado sus casas. Las autoridades han asegurado que tras la investigación hay indicios que unen al mandatario brasileño con el caso de corrupción de Petrobras.

En concreto, Lula ha sido arrestado por haberse beneficiado del sistema de sobornos de la empresa estatal Petróleos Brasileños (Petrobras) a través de las reformas que ha llevado a caso en sus casas de vacaciones. También existen evidencias de que las campañas y los gastos del antiguo presidente fueron costeados de modo fraudulento.

Hace meses que el nombre de Lula, como el de la propia Dilma Rousseff aunque en menor medida, suena como parte de la trama corrupta de sobornos de la petrolera estatal. Por el camino han caído otros miembros del Partido de los Trabajadores (PT) pero esta la primera vez que llega tan alto.

Tras el registro del edificio donde también vive su hijo Fabio Luiz Lula da Silva, Lulinha, la sede del Instituto Lula, una finca en Aribaia y un apartamento en el balneario de Guarujá, entre otros lugares, por orden del juez Sergio Moro, se ha pasado a la detención de Lula.

Según confirman las autoridades brasileños y recoge el diario El Mundo, el registro en la casa de Lula en Sao Bernardo do Campo, en la periferia de Sao Paulo, ha comenzado a las seis de la mañana hora local. Lula ha sido detenido para que preste declaración. Al tratarse de un traslado coercitivo, la persona es trasladada para declarar y posteriormente es liberada.

El Instituto Lula negó hace unas semanas cualquier tipo de ilegalidad después de que la revista Istoé publicase una supuesta declaración del antiguo líder del Gobierno en el Senado, Delcidio Amaral, en el que acusaba tanto a Lula como a Rousseff de conocer la trama corrupta e intentar ocultarla ante la Justicia.

El propio Lula ha insistido en que es inocente de los delitos que se le achacan y que está al servicio del PT, tanto ha insistido en ello que ha llegado a asegurar que se presentaría como candidato a la Presidencia para 2018.

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