El anuncio del candidato a las elecciones presidenciales, Andrés Manuel Obrador de no reconocer a Peña Nieto como presidente y su intentado por volver a contar votos ha hecho que la máxima autoridad electoral se haya decantado por hacer un nuevo conteo de un tercio de ellos. El anuncio del candidato a las elecciones presidenciales, Andrés Manuel Obrador de no reconocer a Peña Nieto como presidente y su intentado por volver a contar votos ha hecho que la máxima autoridad electoral se haya decantado por hacer un nuevo conteo de un tercio de ellos.
El consejero electoral, Alfredo Figueroa, ha informado que entre 45.000 y 50.000 paquetes de votos podrían ser reabiertos a partir de hoy, porque hubo errores en la “captura de información de las actas o diferencias menores entre un punto porcentual entre dos candidatos”.
Pese a las múltiples críticas por parte del actual presidente, que echa la culpa de todo esto a un “berrinche”, López Obrador ha asegurado que actúa con absoluta responsabilidad y legalidad. Aunque esta no es la primera vez que actúa así, cuando en 2.006 perdió contra Felipe Calderón por un 0,5% se pasó medio año movilizando las calles y autoproclamándose “presidente legítimo”.
Desde el Instituto Federal Electoral (IFE) consideran que la diferencia de Peña Nieto supone una brecha que va más allá de posibles irregularidades. Además se mostraron más que convencidos de que el sistema mexicano es el más seguro del mundo, es imposible hacer fraude”.
