El Episcopado colombiano ha alertado al Gobierno de posibles fraudes en los próximos comicios electorales regionales del 30 de octubre. Además, los actos de violencia contra los candidatos se han multiplicado en comparación con las últimas elecciones. El Episcopado colombiano ha alertado al Gobierno de posibles fraudes en los próximos comicios electorales regionales del 30 de octubre. Además, los actos de violencia contra los candidatos se han multiplicado en comparación con las últimas elecciones.
Esta es la segunda vez en este año que el Episcopado colombiano confirma la posibilidad de irregularidades en algunas regiones y ciudades del país. En esta ocasión han hecho pública una carta dirigida al Presidente Juan Manuel Santos y a las demás autoridades competentes.
«Donde la Iglesia está presente hasta en el rincón más alejado de Colombia, sabemos de la compra de votos, de la migración de votantes, tarjetas falsificadas y el hecho de que hasta los muertos comienzan a votar. Reiteramos que ninguno de estos defectos son admisibles en el acto de votar. No podemos estar de acuerdo o ser cómplices con los deshonestos», confirma la Conferencia Episcopal de Colombia.
Además, los obispos han anunciado que el próximo domingo 23 de octubre, se dará lectura a una carta pastoral en la que ofrecerán a los fieles católicos y al pueblo colombiano «algunas orientaciones fundamentales para que los comicios puedan contribuir eficazmente a la construcción de una Nación más democrática, justa y solidaria», en todas las parroquias del país.
«Es necesario blindar el proceso electoral del influjo de agentes de corrupción y de organizaciones criminales, muy activos en ciertas regiones del país. Los electores deben poder ejercer su deber ciudadano libremente, sin presiones y con las debidas garantías de seguridad», afirma el Episcopado.
Según el Encargado de las relaciones de la Iglesia con el Estado, el Padre Pedro Mercado Cepeda, el objetivo de la carta es “invitar a las autoridades a ejercer una mayor vigilancia para evitar cualquier tipo de presión que pueda entorpecer el carácter libre y democrático de las elecciones».
A esto se le añade el incremento de la violencia contra los candidatos. Al menos 36 de ellos han sido asesinados y otros 13 activistas han muerto violentamente, de acuerdo con la Misión Observación Electoral (MOE).
Hasta el 22 de septiembre, se han constatado 138 actos de violencia contra los 100.000 candidatos a cargos locales, entre ellos amenazas, ataques y secuestros. Esta cifra es más del doble que en toda la campaña de las últimas elecciones locales en el 2007, cuando 14 candidatos fueron asesinados.
A raíz de esto, el pasado día 1 de octubre, el ministro del Interior de Colombia, Germán Vargas Lleras, confirmó un despliegue de 351.000 soldados en el marco del Plan Democracia cuyo fin es garantizar el orden público el 30 de octubre.
