La huelga nacional de los sindicados anti-Kirchner que tuvo lugar el pasado 28 de agosto en Argentina se ha saldado con pérdidas de 1.143 millones de dólares, unos 870 millones de euros. Así lo considera el economista Fausto Spotorno. La huelga nacional de los sindicados anti-Kirchner que tuvo lugar el pasado 28 de agosto en Argentina se ha saldado con pérdidas de 1.143 millones de dólares, unos 870 millones de euros. Así lo considera el economista Fausto Spotorno.
Spotorno ha comentado en una entrevista en la radio local América, de la que se hace eco la prensa de la zona, que “entre las dos grandes movilizaciones de este año, la pérdida ha sido de casi 3.000 millones de dólares”.
Esta medida de fuerza, ha recordado también el economista, fue convocada básicamente por tres centrales opositoras al Gobierno de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner: la Confederación General del Trabajo (CGT) de Hugo Moyano, Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos (Uthgra), encabezada por Luis Barrionuevo, y la Central de Trabajadores Argentinos (CTA), liderada por Pablo Micheli.
Existen contradicciones sobre el seguimiento de la huelga, mientras que el jefe del Gabinete de Ministros, Jorge Capitanich, anunció que el 75% de los trabajadores no se adhirió, los organizadores cifran la participación en el 80%.
Las peticiones que han hecho los sindicatos son cambios en el pago de los impuestos (con el Impuesto a las Ganancias como telón de fondo) y una mejora en la inflación del país, que ya supera el 40% anual, según fuentes privadas.
