Unos 14 millones de mexicanos trabajaron dentro de la economía sumergida, en lo que se denomina el empleo informal, durante el 2011. Unos datos que han supuesto un aumento de más de un millón de personas dentro de este sector con respecto al 2010. Esta cantidad de trabajadores se corresponde al 29,2% de la población activa del país latinoamericano, según ha concluido un informe elaborado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) de México. Unos 14 millones de mexicanos trabajaron dentro de la economía sumergida, en lo que se denomina el empleo informal, durante el 2011. Unos datos que han supuesto un aumento de más de un millón de personas dentro de este sector con respecto al 2010. Esta cantidad de trabajadores se corresponde al 29,2% de la población activa del país latinoamericano, según ha concluido un informe elaborado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) de México.
El aumento de la economía sumergida con respecto al 2010 es de un 29,2% más de trabajadores que tienen un puesto dentro del empleo no regulado por el Estado, es decir 1,6 millones más de personas que se han incorporado a este sector durante el año anterior.
Para varios analistas este incremento se debe a que el número de empleos formales no fue suficiente o que la remuneración de estos fue la necesaria para que la población se mantuviera dentro de los puestos controlados por el Gobierno mexicano.
La situación del empleo en el Estado es muestra del fracaso del Gobierno de Felipe Calderón, que había prometido convertirse en el ‘presidente del empleo’ ha indicado Javier Salinas, el secretario de Finanzas del Partido de la Revolución Democrática, forma parte de la oposición al presidente.
Los analistas han asegurado que México generó el mayor número de empleos informales desde que se conocen las cifras de este sector a través del registro laboral en el país, que comenzó a elaborarse hace dos años. Los expertos han argumentado que el país latinoamericano necesita crear más de un millón de nuevos empleos para el 2012, sin embargo la situación de su economía no lo permite.
