Las grandes figuras de la cultura de Cuba han exigido un cambio en la revolución. El último en unirse a esta solicitud ha sido el ‘fidelista’ Silvio Rodríguez que en presencia del ministro de Cultura cubano, Abel Prieto, y con motivo de la presentación de su nuevo disco ‘Segunda Cita’ ha pregonado que hay superar la «erre» de revolución y que el país pide a gritos «evolución». El cantautor cubano ha añadido que es momento de «revisar montones de cosas, montones de conceptos, hasta instituciones». Las grandes figuras de la cultura de Cuba han exigido un cambio en la revolución. El último en unirse a esta solicitud ha sido el ‘fidelista’ Silvio Rodríguez que en presencia del ministro de Cultura cubano, Abel Prieto, y con motivo de la presentación de su nuevo disco ‘Segunda Cita’ ha pregonado que hay superar la «erre» de revolución y que el país pide a gritos «evolución». El cantautor cubano ha añadido que es momento de «revisar montones de cosas, montones de conceptos, hasta instituciones».
Pero estas declaraciones han calado muy hondo en la sociedad cubana, donde Silvio es considerado como un mito de la cultura de la Isla y un gran defensor del régimen de Fidel Castro. Además, estos comentarios han sido realizados cuando Cuba se encuentra en el centro de atención mundial tras la muerte del opositor Orlando Zapata, después de 85 días en huelga de hambre, a la que el cantautor no ha hecho referencia.
Silvio Rodríguez también ha lamentado que la prensa oficial cubana haya silenciado las inquietudes que desde hace años entran en debate en la Isla, tanto en medios académicos como entre determinada gente, que esta a favor de un cambio en el régimen de Cuba.
Además, el cantautor ha solicitado honestidad y ha pedido que no se achaquen todos los problemas de Cuba al bloqueo de EEUU, porque es una gran mentira. Pero como era de esperar, en la prensa o en la televisión cubana, no se ha mencionado ni una palabra de lo que ha dicho Silvio, aunque el debate dentro del sistema se aviva.
Pablo Milanés, otro músico de fama internacional, este mes, desde España, ha realizado unas declaraciones especialmente directas, al reclamar que su país «avance con ideas y hombres nuevos» y haga «otra revolución», ya que «el sol enorme que nació en el 59» se llenó de manchas al «ponerse viejo».
Pero lo que destacan los expertos en Cuba es que hay que diferenciar entre Pablo y Silvio. Aunque los dos han sido voces emblemáticas de la revolución, Pablo siempre ha sido muy crítico y Silvio ha representado el firme compromiso de un militante.
Las declaraciones de Silvio Rodríguez tienen una importancia mayor tras su participación en el concierto de Juanes en la Plaza de la Revolución de La Habana el pasado mes de septiembre. Lo que supuso un enorme ‘spot’ publicitario del inicio de una edad de oro para la industria de la música en castellano y el negocio cultural cubano.
Sin embargo, ‘Radio Bemba’ (el nombre con el que se denominan los rumores en Cuba) destacó una serie de singularidades, como el hecho de que haya sido la primera vez en la historia de la Revolución en la que se ha producido una gran movilización popular no promovida por la nomenclatura cubana y en la que participó el cubano Silvio Rodríguez.
Junto a Juanes y a Silvio actuaron entre otros el español Miguel Bosé o los también cubanos Tanto Amaury Pérez y Fernán Martínez.
Pero Silvio Rodríguez ya ha tenido relaciones empresariales con EEUU, en concreto, vio editado en 1991 su única grabación disponible por el momento en el país norteamericano, ‘Canciones Urgentes’, publicada por LuakaBop, la discográfica del ex-cantante de ‘Talking Heads’ David Byrne y distribuida por Warner.
