Ollanta Humala ha hecho públicos los nombres de los ministros que compondrán su primer Gabinete, entre los que resaltan tres hombres, en principio, ajenos a su programa político de redistribución social: Luis Castilla, el viceministro de Hacienda del presidente saliente, Alan García, a quien Humala ha otorgado el Ministerio de Economía y Finanzas; y dos cercanos asesores de Alejandro Toledo, Kurt Burneo, quien se hace con la cartera de Producción, y Daniel Mora, un general retirado del Ejército, que ocupará el Ministerio de Defensa. Ollanta Humala ha hecho públicos los nombres de los ministros que compondrán su primer Gabinete, entre los que resaltan tres hombres, en principio, ajenos a su programa político de redistribución social: Luis Castilla, el viceministro de Hacienda del presidente saliente, Alan García, a quien Humala ha otorgado el Ministerio de Economía y Finanzas; y dos cercanos asesores de Alejandro Toledo, Kurt Burneo, quien se hace con la cartera de Producción, y Daniel Mora, un general retirado del Ejército, que ocupará el Ministerio de Defensa.
Los puestos, claves, se han otorgado con el fin de ofrecer una imagen integradora y de moderación que calme a mercados, empresarios e inversores, después de que Toledo y su partido Perú Posible aceptaran apoyar a Humala.
En medio de una gran expectación, Ollanta Humala ha desvelado los primeros detalles de su gabinete: Rafael Roncagliolo, sociólogo, ocupará la cartera de Relaciones Exteriores; el ingeniero Carlos Herrera, la de Energía y Minas; Salomón Lerner Ghitis, empresario y cercano asesor, se hace con el puesto de jefe de gabinete; y Luis Castilla, a cargo del clave ministerio de Economía y Finanzas. A cargo del Ministerio de la Mujer, Aída García Naranjo (del Partido Socialista), y, en Ambiente, Ricardo Giesecke. Así pues, una socialista, tres hombres de Toledo y cinco de Gana Perú conformarán el nuevo Gobierno que regirá los destinos del país en los próximos años.
Humala busca claramente con estos nombramientos ofrecer una impresión muy alejada del radicalismo que los medios peruanos más conservadores le han venido atribuyendo. El otrora cercano a la ideología bolivariana de Hugo Chávez ha decidido tomar un camino continuista con el Gobierno de García y mantener a una de sus figuras clave, Castilla, en un puesto de responsabilidad como el de Economía y Finanzas. ¿El motivo? Castilla es un ortodoxo conocido y apreciado entre empresarios e inversores y defensor del libre mercado, por lo que a través de su nombramiento Humala lanza un mensaje de tranquilidad y moderación en el plano económico.
El político nacionalista, que asumirá el cargo de presidente el 28 de julio, ha señalado que «lo que nosotros planteamos es reconocer las cosas buenas que se han venido haciendo, como es por ejemplo la estabilidad macroeconómica y una política monetaria que ha dado tranquilidad al país». Así, en su gobierno se incluyen además dos cercanos asesores del ex presidente Alejandro Toledo, quien ha expresado públicamente su apoyo a Humala tras una reunión entre ambos en la que se selló el apoyo de Perú Posible (partido de Toledo) a Gana Perú (partido de Humala). Esos dos políticos son Kurt Burneo, quien se hace con la cartera de Planificación, y, Daniel Mora, un general retirado del Ejército, al frente del Ministerio de Defensa.
De esta forma, el político nacionalista se aleja de la imagen radical e intervencionista que tanto daño le ha hecho en el pasado y que ha venido desatando el pánico periódicamente en la Bolsa peruana. «Lo que estamos haciendo nosotros es organizar un gobierno de concertación nacional», ha señalado Humala, cuyo Gobierno tendrá que maniobrar de forma que combine el respeto al libre mercado y los gastos sociales que el político prometió durante su campaña electoral. Otro signo de su pragmatismo ha sido la decisión de mantener al conocido economista Julio Velarde al frente del Banco Central.
