Aunque la toma de poder del nuevo presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, no se produzca hasta el 7 de agosto, mañana comienza la legislatura con la formación del nuevo Congreso. En el inicio de la nueva época política colombiana, el Gobierno entrante abordará varios proyectos claves ya anunciados en las promesas electorales, entre los que figuran la reforma fiscal, y la del sistema de derechos que deben pagar los mineros por la explotación de las tierras. Aunque la toma de poder del nuevo presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, no se produzca hasta el 7 de agosto, mañana comienza su legislatura con la formación del nuevo Congreso. En el inicio de la nueva época política colombiana, el Gobierno entrante abordará varios proyectos claves ya anunciados en las promesas electorales, entre los que figuran la reforma fiscal, y la del sistema de derechos que deben pagar los mineros por la explotación de las tierras.
Santos deberá continuar con la propuesta de reforma fiscal que presentó su antecesor Álvaro Uribe hace quince días. El proyecto pretende garantizar la estabilidad del país, obligando a manejar eficientemente los ingresos adicionales generados como consecuencia del auge en el sector minero-energético.
El gobierno de Juan Manuel Santos presentó hace quince días la nueva regla fiscal, que obliga a las autoridades del Estado a restringir los gastos y disminuir la deuda. Esta reducción del gasto público continuará aunque se tengan mayores ingresos, con el fin de tener un colchón en tiempos de crisis. Su objetivo es garantizar la estabilidad económica del país tanto en tiempos de bonanza como en tiempos de crisis.
La norma implica un compromiso por parte del gobierno de generar un superávit primario, reducir la deuda pública y crear un fondo de estabilización. El superávit primario es la diferencia entre ingresos y gastos sin tener en cuenta los pagos de intereses de deuda.
El objetivo es bajar el PIB a un 28% en el 2020, cuando ahora está alrededor del 39%. La deuda pública, por su parte, bajaría en un monto comprendido entre 28.000 millones de dólares (22.217 millones de euros) y 30.000 millones de dólares (23.804 millones de euros) en los próximos diez años, tal como declaró el Ministro de Hacienda, Óscar Iván Zuluaga.
La nueva regla fiscal surge ahora debido al “auge en la economía del país, sobre todo en el sector energético”, según comentó a Americaeconomica.com Alejandro Mejía, Gerente de Relaciones con el Inversor de Bancolombia.
El gobierno pretende con ella utilizar los recursos excedentes que se generen por el crecimiento actual del país para, en primer lugar, pagar la deuda pública, y conseguir crear un fondo de estabilización que permita el ahorro a futuro.
Por otra parte, una de las discusiones más fervientes que se prevén en el Congreso es la relativa al monto de dinero que deberán pagar las empresas mineras por la explotación de las tierras colombianas, la llamada Ley de Regalías.
El equipo del gobierno saliente ha estado trabajando conjuntamente con el entrante sobre el proyecto de reforma legislativa. Durante la campaña electoral de Juan Manuel Santos se plateó la posibilidad de destinar el 10% de estos recursos provenientes de los derechos de explotación minera a ciencia y tecnología, así como a la creación de un fondo de ahorro. Ahora se plantea la idea de una redistribución entre las regiones, que recibirían menos dinero en aras de un ahorro nacional.
El 20 de julio se cumple el aniversario de la batalla de Bocayá, fecha crucial para Colombia. Fue el día en el que, en 1819, Bolívar logró entrar en Bogotá. Tradicionalmente, es en esta fecha cuando, cada cuatro años, se instala el nuevo Congreso resultante de las elecciones.
El nuevo presidente Juan Manuel Santos tomará posesión del poder el próximo 7 de agosto, fecha en la que comenzaron los movimientos independentistas del país en el año 1810.
