El presidente de Haití, Michel Martelly, ha formalizado la inclusión de su país en alianza con las cumbres ALBA, plataforma de Hugo Chávez, presidente de Venezuela, para compartir su lucha bolivariana con diversos países latinoamericanos del eje de izquierdas. Sin embargo, el principal enemigo de esta organización, EEUU, ve con buenos ojos la gestión que está realizando Martelly en Haití. El presidente de Haití, Michel Martelly, ha formalizado la inclusión de su país en alianza con las cumbres ALBA, plataforma de Hugo Chávez, presidente de Venezuela, para compartir su lucha bolivariana con diversos países latinoamericanos del eje de izquierdas. Sin embargo, el principal enemigo de esta organización, EEUU, ve con buenos ojos la gestión que está realizando Martelly en Haití.
En la XI Cumbre del ALBA, que se desarrolló en Caracas, Venezuela, se aprobó también el ingreso de Santa Lucía y Surinam. En la cita también se congregaron mandatarios de Cuba, Bolivia, Nicaragua, Ecuador y obviamente también estuvieron presentes los anfitriones venezolanos.
Un informe de James R. Clapper, director de la Inteligencia Nacional de EEUU, habla sobre el comportamiento de Martelly desde que en mayo de 2011 accediera a la presidencia del país.
Al ex cantante Martelly haitiano lo retratan como un hombre que ha cometido grandes errores de gestión pero que está haciendo que su país progrese en el avance del Estado de Derecho, en educación, vivienda e infraestructuras. Además creen que está ayudando al desarrollo y crecimiento económico de Haití.
