Los responsables del Banco Central de Chile han conseguido por fin que el peso chileno se deprecie frente al dólar estadounidense y que lo haga antes incluso de que comience su anunciada intervención en el mercado cambiario. En las últimas semanas, la divisa chilena había alcanzado una cotización récord de 31 meses frente al billete verde. Sin embargo, en la misma jornada en la que se produjo la ‘amenaza’ de la autoridad monetaria, la divisa chilena se depreció un 4,53% frente al dólar, en su mayor variación diaria de la última década. Los responsables del Banco Central de Chile han conseguido por fin que el peso chileno se deprecie frente al dólar y que lo haga antes incluso de que comience su anunciada intervención en el mercado cambiario. En las últimas semanas, la divisa chilena había alcanzado una cotización récord de 31 meses frente al billete vere. Sin embargo, en la misma jornada en la que se produjo la ‘amenaza’ de la autoridad monetaria, el peso retrocedía un 4,53% frente al dólar, en su mayor variación diaria de la última década.
La moneda chilena, una de las más apreciadas de la región latinoamericana al haber acumulado en 2010 un avance del 8,4% frente al dólar, cotizó al cierre de la sesión de ayer a 488,10 pesos por cada billete verde. El día anterior se daban 466 pesos por cada dólar. Este fue su valor más alto en 31 meses.
Algo que preocupaba mucho a los exportadores, responsables de cerca del 65% del Producto Interior Bruto (PIB) chileno. Dicho gremio ha visto mermar su competitividad en el mercado internacional al encontrarse con una moneda local más cara. Por lo que durante los últimos meses ha reiterado su petición de una intervención en el mercado cambiario en numerosas ocasiones. Algo de lo que los responsables del Banco Central de Chile no son especialmente partidarios.
Sin embargo, en esta ocasión han tenido que ceder a las presiones. La debilidad de la divisa estadounidense, sumada al alza del precio del cobre, han impulsado sobremanera el peso chileno. El cobre es el principal producto de exportación y generador de divisas de Chile, y su valor se encuentra en el más alto de la historia. El metal se intercambia a cerca de 4,41 dólares por cada libra (algo más de 453 gramos) en la Bolsa de Metales de Londres.
Por todos estos motivos, esta misma semana el presidente del instituto emisor chileno, José de Gregorio, ha anunciado una intervención en el mercado cambiario. El Banco Central comprará un total de 12.000 millones de dólares (8.986 millones de euros) durante todo el 2011.
En una primera etapa del programa, vigente desde el 5 de enero y hasta el 9 de febrero, la autoridad monetaria adquirirá diariamente 50 millones de dólares (algo más de 37 millones de euros).
Esta compra periódica de divisas situará la posición de liquidez internacional del organismo emisor en el equivalente a un 17% del PIB del país. El objetivo de la iniciativa es llevar las reservas internacionales, que sumaban 27.404 millones de dólares (20.522 millones de euros) a mediados del pasado mes de diciembre, a un rango compatible con los valores observados en economías similares a las chilenas. De esta forma, se intentan suavizar los efectos del ajuste cambiario al que ha estado sometida la economía de Chile. Al menos, esto es lo que se puede leer en el comunicado que ha emitido el instituto.
Se trata de la primera intervención del Banco Central chileno en el mercado cambiario desde el año 2008. En esa ocasión llevó a cabo una compra de divisas destinada a aumentar sus reservas en unos momentos en los que la moneda chilena se ubicaba cerca de las 430 unidades por cada billete verde. El programa incluía la compra de 8.000 millones de dólares (5.991 millones de euros) bajo un mecanismo parecido al adoptado ahora.